MINGA GUAZÚ. Un equipo fiscal efectuó ayer una serie deallanamientos en busca de una falsa religiosa imputada por trata de personas. El reclutamiento de víctimas (caso denunciado afecta a una adolescente) se hacía en una supuesta congregación que no estaba reconocida por la Iglesia Católica.
Desde tempranas horas del miércoles, un equipo de tres fiscales efectuó allanamientos simultáneos de viviendas en busca de Rufina Salinas Acuña (54), quien se encuentra prófuga tras ser imputada por trata de personas.
La fiscal Vivian Coronel, titular de la investigación, informó que en una de las casas intervenidas hallaron evidencias que indican que Salinas Acuña estuvo en el sitio el día anterior. En la casa allanada, la comitiva igualmente encontró solo a un adolescente en estado de abandono y con una enfermedad. Se trata del hijo de la propietaria de la vivienda, que será investigada en una nueva carpeta fiscal. Los fiscales Luis Trinidad y Diana Gómez, coadyuvantes en el caso, realizaron los otros allanamientos.
DOS ESTÁN IMPUTADAS
Salinas Acuña y Olga Bogado Cubas están imputadas por la fiscal Coronel por el delito de trata de personas, tras ser denunciados por una adolescente de 14 años. Según la investigación fiscal, el 19 de marzo pasado, Salinas Acuña se presentó en la casa de la familia de la adolescente. Tras un acuerdo con la madre, llevó a la menor hasta la sede de una supuesta congregación religiosa.
Luego, el 27 de marzo, la víctima fue trasladada hasta una vivienda ubicada en Luque con el pretexto de recibir una formación religiosa. Sin embargo, terminó sometida a un trabajo forzoso; además, de maltratos físicos y psicológicos de parte de Bogado Cubas, de acuerdo a la denuncia.