Hay grupos de ciclistas, excursionistas y también los que se animan a ir caminando a la Villa Serrana desde la cabecera del Puente de la Amistad, como lo hizo ayer, a primeras horas de la mañana, un grupo de pobladores del km 12 de la capital departamental. Una enorme cruz y la imagen de la virgen llevada a cuestas, con la que deben llegar hasta el santuario mayor del país en los próximos días.
Habitualmente, optan por el horario nocturno para iniciar la peregrinación, atendiendo las altas temperaturas de esta época del año, pero el grupo partió ayer en horas de la mañana, con acompañamiento del grupo de apoyo para la provisión de alimentos, medicina y todo lo necesario en el prolongado trayecto, inclusive el vehículo con músicas de la santa madre que les serve de estímulo a los devotos.
Son muchos los altoparanaenses que están yendo a Caacupé, pero no todos caminan desde el departamento. Una de las tradiciones de los devotos de la virgen es caminar desde la zona de Coronel Oviedo y otros desde el punto conocido como “Kurusu peregrino”.
Las recomendaciones para todos los grupos que vayan a la Capital Espiritual es cumplir con las medidas sanitarias para evitar una proliferación de contagios del coronavirus, luego de la fiesta católica más importante del Paraguay.