Los concejales esperan que durante la sesión de hoy de la comisión permanente de la Junta Departamental, el gobernador Roberto González Vaesken remita la lista de obras ejecutadas con recursos de la institución. La semana pasada, los ediles pidieron la lista de construcciones con la intención de realizar los controles y así descartar la existencia de obras fantasmas. La mayoría de la Junta responde al gobernador y hace la vista gorda a diversas falencias.
Los ediles solicitaron la semana pasada la lista de obras al gobernador.
Los miembros de la comisión permanente solicitaron al gobernador una lista de las obras que fueron ejecutadas por la Gobernación del Alto Paraná, gran parte de ellas, con recursos del Fonacide y royalties.
“La intención es que tengamos la lista para que podamos recorrer las construcciones y constatar de que no existan obras fantasmas. Como no podemos detener las obras ni rechazar licitaciones que nos parecen irregulares, lo único que podemos hacer es constatar la correcta ejecución de las obras”, expresó el concejal Carlos Mora.
Agregó que existe un promedio de 200 construcciones ejecutadas por la Gobernación, en los papeles, con el presupuesto 2019, que fue de unos G. 122.000 millones.
EJECUCIÓN PRESUPUESTARIA
En los próximos días, el gobernador debe presentar ante la Junta su ejecución presupuestaria 2019. El legislativo, que en su mayoría responde a él, debe aprobar o rechazar su rendición de cuentas. Los ediles tienen un mes para estudiar las documentaciones arrimadas, tiempo que es considerado demasiado corto para realizar un estudio pormenorizado a todos los rubros.
ALIMENTOS PARA ESCOLARES
“De los G. 122.000 millones, unos G. 85.000 millones son destinados a compra de leche, galletita, chipitas y almuerzo escolar, es mucho dinero, y son los rubros en donde más controles debe haber, pero lastimosamente no existe”, expresó el concejal Mora.
Agregó que los concejales no tienen participación en la elaboración del pliego de bases y condiciones, y en la aprobación o rechazo de las adjudicaciones en cuanto a los alimentos que van a parar a las casas de estudios del décimo departamento.
El año pasado, se detectaron irregularidades en la licitación para almuerzo escolar, adjudicado a la empresa Girasol S.A., que no reunía mínimamente los requisitos para prestar el servicio, pero firmó un contrato por G. 9.000 millones. Finalmente, y a mitad de año, la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas dispuso que se realice nuevamente el llamado, ya que fueron detectadas numerosas anomalías.
