El intendente de Hernandarias, Rubén Rojas (ANR), sigue inflando el presupuesto de la Municipalidad, pese a que recientemente pidió un préstamo de G. 3.000 millones para pago a funcionarios, alegando baja recaudación. Contradiciendo su argumento inicial, la semana pasada, el jefe comunal solicitó una ampliación presupuestaria a la Junta por más de G. 5.000 millones, al señalar que está recaudando y necesita gastar en pago de honorarios profesionales y servicios personales. Se critica que así se aumenta cada vez más el endeudamiento de la institución.
El intendente estaría acrecentando el déficit existente en la comuna hernandariense.
A inicios de setiembre, el intendente pidió a la Junta Municipal la autorización para acceder a un préstamo de G. 3.000 millones para pago de salario a funcionarios, al alegar que existe baja recaudación los últimos meses del año. El pedido le fue aprobado por el legislativo municipal. Sin embargo, en completa contradicción con sus argumentos de baja recaudación, el martes de la semana pasada, el jefe comunal solicitó una ampliación presupuestaria de G. 5.184 millones para pago de honorarios profesionales y servicios personales, es decir, para contratación de personal. El requerimiento del intendente fue aprobado sobre tablas por la mayoría oficialista, integrada por los que votaron a favor del pedido del intendente, Jorge Arzamendia (PLRA), Aniceto López (PPS), Guido Venialgo (ANR), Hugo Duarte (ANR), Carlos Bergottini (Independiente) y Cristina Rojas (FG). Bergottini, con su doble voto, como titular del legislativo, decidió por la aprobación.
En tanto, los que votaron en contra fueron Wilson Ayala (ANR), Jhon Florentín, Demetrio Soler, Alcira Cáceres y Alberto Báez.
Báez explicó que el pago por honorarios profesionales es para la remuneración a abogados por un caso perdido por la Municipalidad contra exfuncionarios que fueron desvinculados tras la asunción de Rojas en la institución. Dicho dinero aún no será destinado para el pago a los despedidos.
“Es un despropósito, un despilfarro de los recursos. No se va a recaudar para llegar a la ampliación solicitada por el intendente, pero sí se va a gastar. Solo se aumenta el déficit con esta decisión y se traslada al próximo año todos estos problemas”, lamentó Báez.
Agregó que es “una paradoja, que los primeros días de septiembre se haya aprobado G. 3.000 millones porque no se recaudaba, sin embargo, tres semanas después presenta un pedido de ampliación porque dice que va a recaudar más, para que pueda gastar para pago de honorarios profesionales y el resto en servicios personales”.
Criticó que la mayoría oficialista aprueba cualquier tipo de iniciativa o requerimiento del intendente, sin el más mínimo análisis crítico de la situación.
