Varios de los esquemas de recaudación paralela siguen gozando de buena salud en la Municipalidad de Ciudad del Este, ya que se observa a fiscales de la Dirección de Transporte Público realizando controles extorsivos a vehículos particulares, la mayoría con chapa extranjera. Los funcionarios no tienen atribuciones para realizar estos procedimientos, ya que se deben limitar a controlar vehículos que ofrecen servicios de transporte público. Los mismos fueron captados llevando a cabo la acción irregular.
Los fiscales de Transporte Público fueron sorprendidos por el fotógrafo de La Clave, realizando supuestos controles a vehículos particulares con chapa brasilera. Los funcionarios exigían documentos, encendido de luces o uso del cinturón de seguridad, cuando esta labor no corresponde, ni por asomo, llevar a cabo por los dependientes de la mencionada división municipal. Esta acción es realizada por los fiscales para exigir un pago con la finalidad de “arreglar” la supuesta infracción, sin necesidad de acudir a la institución municipal.
La “fiscalización” con el fin de requerir pagos en concepto de coima se realizaba el sábado último cerca del mediodía, en inmediaciones de la Aduana, sobre la avenida Monseñor Rodríguez. Los conductores extranjeros que se disponían a salir del país por el Puente de la Amistad optaban por pagar para evitar contratiempos y seguir su camino.
Los trabajadores de la zona del microcentro dijeron que esta práctica ejecutada por los municipales es común y las principales víctimas son los turistas.
Por su parte, al ser consultados los fiscalizadores del porqué de los controles, alegaron que verificaban el funcionamiento de prestadores de servicio de Uber, función que tampoco les corresponde. Estos funcionarios solamente pueden verificar la documentación y condiciones técnicas de colectivos del transporte público, mototaxistas, taxistas, trabajadores de transporte alternativo y rodados que ofrezcan este tipo de servicios.
No es la primera vez que los funcionarios actúan de esta manera, ya que en varias ocasiones fueron vistos interceptando autos particulares y motos con chapa paraguaya, sin que estos presten servicio de transporte público. Pese a que la denuncia pública ya fue hecha, los directores y la Intendencia, a cargo de Miguel Prieto, no tomaron medidas al respecto.
En contrapartida, el control que realizan a los ómnibus urbanos que circulan por la ciudad no logra que los usuarios reciban un mejor servicio.
NO DIO RESPUESTAS
Intentamos comunicarnos con el jefe de la Dirección de Transporte Público, Nilson Acosta, pero no respondió a las llamadas. Igualmente, hicimos las consultas sobre el tema a través de mensajes, pero tampoco logramos obtener la versión del funcionario.
