Se le va complicando de a poco la sitú al intendente Miguelito Prieto. Está bien que le haya declarado “la guerra” al clan ZI, pero desde un principio, Miguelito, nada amistoso, buscó el conflicto con la mayoría de la Junta, sin consultar nada a los ediles, tomando decisiones a mansalva. Por lo visto, éste muchacho nunca escuchó hablar de diplomacia y consenso. ¿No tiene piko asesores que le puedan ayudar?
Pero la “cereza de la torta” fueron sus declaraciones furibundas contra la fiscal general del Estado Ña Sandra Quiñónez. Ya al día siguiente empezaron a llover las querellas a Prieto, que estimamos, recibirán un meticuloso seguimiento de parte de los agentes fiscales. No es buena idea hacerse de enemigos tan poderosos, en poco tiempo y él como intendente debería de saberlo. Y así nos va…
En la UNE cunde el pánico porque hay amenazas de recortes en el presupuesto. Hablan de “movilizarse, de declararse en sesión permanente” y cosas por el estilo, para intentar revertir el panorama. ¿Y qué tal si empiezan a racionalizar gastos, cortando onerosos sueldos, viáticos, viajes de placer y otros vyrorei que se siguen cometiendo a la vista de todos? ¿O será pedir demasiado?
Casi de casualidad, los de Aduanas en el Puente de la Amistad pillaron un camión cisterna que cargaba unas seis toneladas de macoña, con destino al Brasil. Solo por una cuestión de peso, le pillaron al chofer, quien se dio a la fuga y abandonó el vehículo. En tanto, los de la Senad y la Policía Antinarcóticos siguen cazando “mariposas” por los barrios y presentan a microtraficantes como “peces gordos, ndaje”. ¡Yaguá to´u nde bola!
