La detención del paraguayo Gustavo Benítez con 85 kilos de cocaína en la cabecera del Puente de la Amistad, lado brasilero, es una muestra clara que el Alto Paraná es una zona liberada para el narcotráfico. Tanto los agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) como de Antinarcóticos de la Policía Nacional, al parecer, se convirtieron en aliados de los criminales, en lugar de combatirlos.
Los procedimientos ejecutados por las dos instituciones (Senad y Antinarcóticos), dotadas para combatir el narcotráfico, no fueron más allá de la detención de simples mulas e incautación de pequeñas cantidades de drogas, especialmente marihuana. En tanto que los grandes narcotraficantes de la zona operan con absoluta impunidad, evidenciándose la complicidad de los responsables de las citadas instituciones.
El lunes a la mañana, un paraguayo, identificado como Gustavo Benítez, fue detenido cuando ingresaba al Brasil, con 85 kilos de cocaína pura. La detención del traficante pone en evidencia que el décimo departamento es utilizado como ruta de los narcos, como consecuencia de la nula acción de los agentes destinados al frente de la Secretaría Nacional Antidrogas y del departamento de Antinarcóticos Regional II, Alto Paraná. El primero opera a cargo de Isabelino Núñez, mientras que el segundo al mando del subcomisario Pablo Zelaya.
El pasado domingo, a fin de justificar su trabajo, procedieron a la detención de cinco personas, además de la incautación de 300 kilos de marihuana, procedimiento realizado en Presidente Franco. El operativo, calificado de “exitoso” por los agentes, se logró mucho tiempo después con el solo objetivo de hacer “marketing”, así como acostumbran las dos instituciones.
MINA DE MARIHUANA
El Alto Paraná es una verdadera mina de plantación de marihuana. Al norte del departamento, existirían centenares de hectáreas de plantación de la hierba mala. Estas plantaciones tendrían el “visto bueno” de los agentes de Senad o Antinarcóticos, además de los uniformados de las comisarías jurisdiccionales, según los datos.
A pesar de que la región es considerada una zona de producción de marihuana, en escasas oportunidades los uniformados proceden a ejecutar operativos con resultados auspiciosos.
