La agente fiscal Ruth Karina Benítez, recientemente designada en la unidad penal nº 8 de Ciudad del Este, nuevamente se ve envuelta en una gran polémica tras liberar en menos de 24 horas a dos presuntos robamotos detenidos por la Policía. Los sospechosos habían sido plenamente reconocidos por la víctima y aparecen en un video de circuito cerrado transportando el biciclo ajeno. La rápida liberación desató la indignación del afectado y fuertes críticas por parte de la Policía.
La citada fiscal tiene una peculiar forma de actuar y es blanco de críticas desde que llegó a Ciudad del Este. Ayer nuevamente ordenó la liberación de dos presuntos ladrones de motocicletas apenas horas después de ser detenidos. Se trata de José Luis Adrian Valdez (22) y Alan Aaron Benítez Troche (24), quienes fueron aprehendidos el lunes alrededor de las 15:30 por agentes de la subcomisaría 46ª del barrio San Juan.
Ambos estaban sindicados como autores del hurto de una motocicleta ocurrido el pasado jueves 1 de mayo. La víctima, Fernando Ramón Cuenca Velázquez (34), reconoció plenamente a los sospechosos mientras caminaba por una calle del km 9 Acaray, en la fracción Palmito Cué, y dio aviso inmediato a la Policía.
Los uniformados interceptaron a los sujetos y los trasladaron a la sede policial, donde se labró el acta correspondiente y se comunicó la aprehensión a la fiscal de turno. Según el informe, uno de los detenidos, Alan Benítez Troche, posee antecedentes por violencia familiar y restricciones judiciales, incluyendo prohibición de portar armas y de consumir alcohol.
EVIDENCIA SUFICIENTE
A pesar de las pruebas, que incluyen imágenes de circuito cerrado donde se observa a los detenidos llevando el biciclo, la fiscal Benítez ordenó su liberación en tiempo récord de los sospechosos. La decisión causó indignación tanto en la víctima como entre los agentes policiales intervinientes. “Es frustrante ver cómo arriesgamos nuestras vidas para detener a estos delincuentes y en menos de un día ya están sueltos”, indicó uno de los intervinientes. En tanto, la víctima, visiblemente molesta, cuestionó duramente a la fiscal y reclamó justicia. “¿De qué sirve denunciar y aportar pruebas si al final todo queda impune?”, manifestó Cuenca Velázquez.
Desde la comisaría señalaron que seguirán el caso hasta agotar todas las instancias y que solicitarán la revisión del procedimiento fiscal ante instancias superiores. El episodio reaviva la discusión sobre la actuación del Ministerio Público en casos de delitos comunes y refuerza la percepción de impunidad que se vive en Ciudad del Este, donde a diario la Policía atrapa a delincuentes, pero los propios encargados de impartir justicia los liberan sin muchos contratiempos.
