
La persistente problemática de los arroyos utilizados como vertederos de basura continúa afectando el paisaje urbano de Ciudad del Este, evidenciando una preocupante falta de conciencia ambiental por parte de algunos vecinos. A pesar de los esfuerzos municipales por mitigar esta situación a través de programas de limpieza y sensibilización, la realidad palpable en los cauces hídricos de la ciudad sigue siendo alarmante.
La escena es desoladora: a lo largo de los arroyos que cruzan por la capital del Alto Paraná, se acumula una ingente cantidad de residuos de todo tipo. Cartones deshechos, marañas de cables inservibles, plásticos de variadas formas y tamaños, papeles, restos de hule, neumáticos abandonados, pedazos de insoportable e incluso cadáveres de animales componen un inventario nauseabundo que atenta contra la salud pública y el equilibrio ecológico.
Esta práctica irresponsable no solo degrada el entorno natural, sino que también tiene consecuencias directas y perjudiciales para los residentes de zonas bajas. La acumulación de basura reduce la capacidad de los cauces, convirtiéndolos en trampas mortales durante las intensas jornadas de lluvia que caracterizan la región.
Barrios como Santa Ana (zona baja), 23 de Octubre, Che La Reina y áreas del kilómetro 9, lado Monday, son testigos recurrentes de inundaciones y anegamientos de viviendas, directamente relacionados con la obstrucción de los arroyos por los desechos.
La Municipalidad de Ciudad del Este ha implementado un programa que combina la limpieza activa de los arroyos con campañas de concienciación dirigidas a la comunidad. Sin embargo, los resultados obtenidos hasta el momento no alcanzan las expectativas, ya que la conducta de arrojar basura a los cauces persiste.
Un claro ejemplo de esta lucha desigual quedó registrado en la reciente intervención de la Dirección de Gestión Ambiental en el arroyo Amambay, a su paso por el barrio Fátima. Durante la jornada, equipos municipales realizaron la limpieza del cauce, recogiendo una gran cantidad de basura. Paralelamente, se llevó a cabo un esfuerzo puerta a puerta, donde funcionarios dialogaron con los vecinos sobre la importancia de un manejo responsable de los residuos y el cuidado del medio ambiente.