El juez de Cordillera, Augusto Acuña, otorgó arresto domiciliario a Eugenio Sanabria Vierci, imputado por el accidente de tránsito ocurrido en noviembre de 2024 que resultó en la muerte de cuatro personas. Esta decisión se fundamentó en un informe médico forense del Poder Judicial que recomendaba el traslado de Sanabria Vierci desde la Agrupación Especializada a su domicilio por razones de salud.
La prisión preventiva que pesaba sobre Sanabria Vierci fue sustituida por esta medida menos restrictiva tras una audiencia de revisión de medidas cautelares. El informe médico presentado indicaba que su reclusión estaba obstaculizando su recuperación.
La resolución judicial provocó una fuerte reacción de indignación entre los familiares de las víctimas. Nancy Jaquet, hermana de uno de los fallecidos, manifestó su profundo dolor y frustración al declarar: “El juez Augusto Acuña envía al asesino de mi familia a su casa. Lo mandan a su casa después de matar a cuatro personas”.
La fiscal de Caacupé, Zulma Benítez, había imputado a Sanabria Vierci por homicidio culposo y exposición al peligro en el tránsito terrestre. El siniestro vial tuvo lugar el 10 de noviembre de 2024, alrededor de las 12:25, en la Eco-vía que conecta San Bernardino con Luque. La investigación preliminar sugiere que el vehículo conducido por Sanabria Vierci invadió el carril contrario en una curva, colisionando frontalmente contra un automóvil Kia Picanto rojo en el que viajaba una familia.
En el acto fallecieron tres de los cuatro ocupantes del Kia Picanto. La hija del matrimonio Jaquet-Blumerother fue la única sobreviviente, aunque sufrió lesiones. Un tercer vehículo, un Hyundai HB20 gris con tres ocupantes, también se vio involucrado, resultando en la muerte de una persona más y heridas en las otras dos.
Las víctimas fatales fueron identificadas como Osvaldo Darío Jaquet Valdez (39), su esposa de nacionalidad alemana, Kristin María Blumerother, el hijo menor de ambos, y Nancy Angeluz Chena Vallejos (57), quien viajaba en el Hyundai. La niña sobreviviente del Kia Picanto fue trasladada a un centro médico para recibir atención.
Un elemento crucial en la investigación fue el resultado del análisis de alcoholemia practicado a los conductores. Mientras que el conductor del Hyundai registró 0,000 mg/l de alcohol en sangre, Sanabria Vierci arrojó un resultado positivo de 622 mg/l, una cifra significativamente superior al límite legal permitido. Este dato fue considerado un agravante importante por el Ministerio Público al momento de formalizar la imputación.
