Agentes de la comisaría 4ª del barrio Pablo Rojas de Ciudad del Este detuvieron el lunes a un joven que se encontraba prófugo de la justicia por un hecho de robo con resultado de muerte en perjuicio de un comerciante, ocurrido el 6 de febrero de 2019 en el local comercial denominado “Bodega La Familia”, ubicado en el kilómetro 5,5 del barrio La Blanca de esta ciudad.
Se trata de Hugo Javier Tindel Segovia, de 23 años, quien fue detenido ayer en la vía pública, en el barrio La Blanca por agentes policiales durante un control de rutina. Tras verificarse su identidad se comprobó que contaba con una orden de captura por un violento robo con resultado de muerte.
En la época del hecho, Tindel Segovia, tenía 17 años, fue inicialmente procesado como menor de edad y condenado a 7 años de prisión. Sin embargo, tras cumplir esa condena, en 2024 el juzgado de ejecución penal emitió una nueva orden de captura (oficio nº 1322) al constatarse irregularidades en su proceso judicial previo, pero el mismo ya no se presentó ante la justicia
ANTECEDENTES DEL CASO
El hecho ocurrió en la noche del 6 de febrero de 2019, a las 23:45, en el interior del local mencionado. En la ocasión, Tindel Segovia y su cómplice, Aníbal Remigio Morales Gauto, alias “Angujá”, ingresaron al local simulando ser clientes, pero rápidamente dieron la voz de asalto. Morales portaba un arma de fuego, mientras que Tindel llevaba un cuchillo de 30 centímetros. Durante el robo, Tindel intimidó al propietario del negocio, Claudio de Jesús Acosta Cardozo, exigiéndole la entrega de la recaudación del día. En medio de un forcejeo, Morales disparó al comerciante en el tórax, causándole la muerte.
En el lugar también estaba Claudio Emanuel Acosta Ortiz, hijo de la víctima, quien intentó socorrer a su padre. Sin embargo, fue golpeado por Tindel con la culata del arma robada al comerciante. Los asaltantes se llevaron un teléfono celular, la recaudación del día y un arma de fuego tipo pistola, huyendo en una motocicleta.
CAPTURAS Y CONDENAS
Tindel Segovia fue detenido una semana después del crimen, reconocido por un tatuaje. Fue procesado como menor y recibió una condena de 7 años, la pena máxima para menores según la legislación paraguaya.
En tanto, su cómplice, Aníbal Remigio Morales Gauto, estuvo prófugo hasta el 2023, cuando fue capturado y condenado a 20 años de prisión por robo con resultado de muerte. En el mismo juicio, un tercer implicado, Rody Miranda Ramírez, fue sentenciado a 3 años por reducción, tras haber comprado el celular robado por 300 mil guaraníes, con conocimiento de su procedencia ilegal.
