Ayer, poco antes del mediodía, ingresó al penal de Tacumbú el exgobernador del departamento Central, Hugo Javier González Alegre, condenado a 10 años de cárcel junto a su exjefe de gabinete. Otros cuatro exfuncionarios hallados responsables de un multimillonario desfalco a las arcas públicas fueron igualmente condenados a penas simbólicas de dos años de cárcel, por el tribunal de sentencia presidido por la juez Karina Cáceres, el pasado sábado.
El exgobernador González Alegre y Miguel Ángel Robles Ibarra, exjefe de gabinete, fueron condenados a 10 años de prisión, luego de ser hallados culpables de lesión de confianza y uso de documentos no auténticos, por las juezas Karina Cáceres, Yolanda Morel y Ana Rodríguez. El sábado pasado se dio a conocer la parte resolutiva de la sentencia definitiva que condenó a los seis acusados.
En tanto, los defensores de los condenados anunciaron que, una vez recibido el contenido íntegro de la S.D. apelarán el fallo por improcedente.
CARGOS DIRECTIVOS
Aparte de los ya citados, fueron sentenciados el ex director de administración y finanzas Javier Marcelo Rojas Giménez; Lourdes Lezcano Decoud, exsecretaria; Luis Eduardo Allende Araujo, ex tesorero y Modesta Valiente, ex secretaria. Todos ellos están con suspensión de la ejecución de la condena, ya que fueron punidos con dos años de cárcel.
El autodenominado “número 2”, Hugo Javier, y su exjefe de gabinete, Robles Ibarra, gozaban de arresto domiciliario hasta el último día del juicio oral y público, pero la medida les fue levantada por el tribunal de sentencia que determinó la inmediata remisión de los citados a la cárcel de Tacumbú.
Hugo Javier González Alegre pasó a ser el preso número 1.955 del penal de Tacumbú, tras comprobar su relevante participación en el desfalco de los fondos de emergencia sanitaria por Covid-19 entre los años 2020 y 2021, según la conclusión de los magistrados, que fueron integrantes del tribunal de sentencia.
APELACIÓN
Los defensores del ex gobernador de Central anticiparon apelación general de la sentencia porque los hechos condenados no fueron probados en el contradictorio, según adelantaron ayer a los medios de comunicación en la capital.