Una intensa lluvia registrada la tarde de ayer desbordó arroyos y generó raudales en Ciudad del Este, dejando varios sectores anegados. Las precipitaciones, aunque breves, fueron suficientes para generar molestias a los ciudadanos. De acuerdo con la Dirección de Meteorología e Hidrología del Aeropuerto GuaranÍ en algunos puntos de la región metropolitana se registraron acumulados de hasta 39,5 milímetros. En tanto, la represa de Itaipu, en Hernandarias, reportó 35,6 milímetros.
El desborde del arroyo Saltito afectó al barrio San Roque, donde varias viviendas quedaron inundadas. Los vecinos se vieron obligados a retirar rápidamente sus pertenencias para evitar pérdidas mayores. En la avenida Guillermina Núñez de Báez, ubicada al costado del Centro Regional de Educación y de la Gobernación de Alto Paraná, se formó una laguna que anegó parcialmente algunos vehículos estacionados.
En el microcentro de la ciudad, los raudales dificultaron el tránsito vehicular y peatonal. Sin embargo, la rápida escorrentía permitió que las aguas disminuyeran en poco tiempo, aunque quedó en evidencia la vulnerabilidad de ciertos puntos críticos ante eventos climáticos de este tipo.
Los afectados por las inundaciones manifestaron su preocupación por la falta de un sistema de drenaje eficiente que permita mitigar estos incidentes, que se repiten cada vez que se registran lluvias intensas. Este fenómeno vuelve a poner sobre la mesa la necesidad de implementar soluciones duraderas para evitar mayores daños en el futuro.