El Lic. Aníbal Báez, jefe regional del Servicio Nacional de Erradicación del Paludismo (SENEPA), advirtió sobre la crítica situación sanitaria en Ciudad del Este debido al alto índice de infestación larvaria del mosquito Aedes aegypti, vector del dengue, zika y chikungunya. Ayer durante una entrevista en Radio La Clave 103.9 FM, Báez destacó que barrios como Catedral, Villa Elvira y Pablo Rojas superan ampliamente los límites aceptables de infestación, aumentando el riesgo de una epidemia. Además, dirigió duras críticas a la Municipalidad y al intendente Miguel Prieto, acusándolos de negligencia y falta de colaboración en las tareas de prevención, motivados presuntamente por cuestiones político-partidarias.
El índice de infestación larvaria promedio en Ciudad del Este es del 7,5%, más del triple del límite aceptable, que es del 2%. El barrio Catedral encabeza la lista con un preocupante 25%, seguido por Villa Elvira (18%), San Juan (16%) y otros sectores como Pablo Rojas, donde la acumulación de criaderos representa un grave peligro. Báez explicó que “a partir de un índice de infestación del 2%, las condiciones ya están dadas para el inicio de una epidemia”, lo que evidencia la gravedad del problema.
El jefe regional del SENEPA también alertó sobre los riesgos adicionales que supone la llegada de visitantes extranjeros durante eventos como el Black Friday, a realizarse entre el 14 y el 17 de este mes. “Principalmente desde Brasil, donde todavía circulan enfermedades como la fiebre amarilla. Si un mosquito transmisor pica a alguien infectado, podríamos tener serios problemas de transmisión”, enfatizó.
CRÍTICAS A COMUNA ESTEÑA
Uno de los puntos más destacados de la entrevista fueron las fuertes críticas dirigidas a la Municipalidad de CDE. Báez reveló que las gestiones para coordinar una gran minga ambiental en los barrios más afectados se encontraron con obstáculos administrativos y una actitud indiferente por parte del gobierno municipal.
“Perdimos dos días tratando de entregar una nota con los datos de los barrios críticos. Nuestro personal fue ignorado, maltratado y obligado a formar filas para que, al final, no recibieran la nota. Es complicado trabajar en estas condiciones”, lamentó.
Además, cuando se solicitó apoyo en recursos humanos y logísticos, la Municipalidad respondió que su personal estaba ocupado en otros proyectos. “Pareciera que la salud pública no es una prioridad para ellos. Esto no se trata de partidos políticos ni de colores, es un problema que afecta a todos los ciudadanos por igual”, agregó.
Ante la falta de respaldo de la Municipalidad, el SENEPA busca alianzas con otras instituciones para continuar con las tareas de prevención. Báez destacó gestiones con la Gobernación de Alto Paraná, la Tercera División de Infantería y la Itaipu Binacional para obtener recursos como camiones, personal y equipos especializados.
“La próxima semana realizaremos una gran minga ambiental en el barrio Pablo Rojas, uno de los más afectados por la acumulación de criaderos, especialmente cubiertas en desuso. También estamos coordinando con Itaipu para disponer de camiones que nos permitan trasladar esos desechos a sitios adecuados”, explicó.
Estas mingas buscan eliminar criaderos, fumigar áreas críticas y sensibilizar a la ciudadanía sobre la importancia de mantener sus hogares libres de agua estancada. Sin embargo, Báez enfatizó que el trabajo coordinado entre instituciones es crucial para lograr resultados efectivos.
Finalmente, el funcionario instó a la ciudadanía y a las autoridades locales a asumir su parte en la lucha contra el dengue. “El mosquito no distingue colores políticos ni clases sociales. Es responsabilidad de todos, desde los vecinos hasta las autoridades, tomar medidas concretas para evitar una epidemia”, afirmó. Además, subrayó que la falta de interés y apoyo por parte de la Municipalidad no debe ser una excusa para no actuar. “Estamos haciendo todo lo posible para suplir esas falencias, pero necesitamos que cada institución y cada persona asuma su rol en este esfuerzo colectivo”, concluyó.