Los investigadores del asesinato del empresario Félix Santiago Sosa Rolandi tienen avances importantes en las pesquisas. Ayer dieron a conocer imágenes de circuito cerrado donde aparece la camioneta de la víctima entrando y saliendo de la casa. En base al vídeo, los policías sostienen que el hombre fue asesinado por alguien de su entorno, ya que ninguna de las puertas y ventanas de la vivienda fue violentada. Lo que no se sabe hasta ahora es si el autor del hecho llegó con el empresario a bordo del vehículo, o ya lo esperaba dentro de la residencia. Aparentemente, el hombre fue ejecutado con su propia arma de fuego, que hasta el momento no fue encontrada.
Según las imágenes de circuito cerrado de una vivienda ubicada en la esquina de la casa del empresario Félix Santiago Sosa Rolandi, de 56 años, más conocido como “Chuky”, la camioneta llega a la casa a las 11:54, y luego de media hora, es decir, a las 12:24, el vehículo sale nuevamente de la vivienda. Esto indica que el crimen ocurrió en esa franja horaria. Lo que aún no se sabe es si el autor del hecho llegó con el empresario a bordo del vehículo, o ya lo esperaba dentro de la casa. Pero se puede colegir que el asesino evidentemente era del entorno de Sosa Rolandi, pues ninguna cerradura de las puertas y ventanas de la residencia fue violentada.
Otro dato que manejan los investigadores es que la víctima habría sido asesinada con su propia arma de fuego, un revólver calibre 357mm, que hasta el momento no fue encontrado. Según datos extraoficiales, las pesquisas se centran en el entorno familiar del empresario; por un lado, aparece la expareja del hombre con quien estaba teniendo un pleito judicial por los bienes, luego de que la mujer lo dejó para ir a vivir con un policía. Ella tenía acceso directo a la casa donde ocurrió el hecho. Por otro lado, también investigan al hijo, un joven de 29 años que también tiene acceso total a la vivienda, y fue el primero en llegar a la escena del crimen.
El empresario fue encontrado muerto en el interior de su casa, el martes último alrededor de las 18:00. Presentaba cinco impactos de bala, uno en la cabeza y los demás en el tórax. El autor del hecho solo llevó la camioneta Mercedes Benz GL 250 D, año 2018, color gris metalizado, con matrícula WCFR 188, que posteriormente abandonó en un camino terraplenado en la ciudad de Hernandarias. A parte del vehículo, la vivienda fue encontrada intacta. Nada fue llevado, ni siquiera la billetera y el aparato celular de la víctima.
MUERTE POR ENCARGO
A juzgar por la escena del crimen, los investigadores no tienen dudas de que se trató de una muerte por encargo, teniendo en cuenta que no había señales de pelea o que el lugar fue removido. Los sicarios no robaron nada de valor y solo llevaron la camioneta para ocultarse de las cámaras.
¿QUIÉN ERA FÉLIX SANTIAGO SOSA ROLANDI?
Félix Santiago Sosa Rolandi, de 56 años, era conocido como “Chuky”. Vivía desde hace mucho tiempo en la vivienda donde fue asesinado. El mismo era empresario dedicado a la venta de llantas y cubiertas, propietario de un local denominado “Zoza Llantas”, ubicado en San Ignacio, Misiones.
Tenía cuatro antecedentes policiales, una por transgresión a la ley 1.340/88, del 2004, otra por exposición al peligro en el tránsito terrestre, del 2007, amenaza de hecho punible, 2016, y coacción sexual en el 2017. De acuerdo a los datos, la víctima venía atravesando problemas con su expareja, una joven mujer que lo dejó para supuestamente ir a vivir con un policía.
A partir de dicho momento, el fallecido y su expareja entraron en un feroz pleito judicial por los bienes. Incluso, la víctima tenía una prohibición de acercase a la mujer, y por consiguiente ya ni tenía acceso a su local comercial. También se habla de que la nueva pareja de la mujer, un supuesto agente policial, habría amenazado de muerte al empresario, y por ello ya no se estaba yendo a su ciudad natal. La otra conjetura gira en torno a una denuncia por estafa que justamente fue elevada a juicio oral y público donde el fallecido fue embaucado por un millonario monto.
VACIÓ LA CASA
Lo llamativo de este caso es que apenas terminó el procedimiento fiscal-policial de inspección de la casa y levantamiento de cadáver, el hijo de la víctima, Paul Antonio Carrillo (29), vació la casa de su padre. Según versiones, llevó electrodomésticos varios, algunos muebles y otras pertenencias del fallecido.