El edificio del Poder Judicial de Ciudad del Este, cuya construcción tuvo un costo de USD 40 millones al Estado paraguayo y fue adjudicada a la empresa Tecnoedil SA, se convirtió en el centro de críticas y preocupación. Desde su inauguración, el complejo presentó graves problemas estructurales, los cuales se hacen evidentes cada vez que ocurre una lluvia intensa. Las filtraciones de agua son tan abundantes que afectan los pasillos y oficinas, exponiendo a funcionarios, abogados y visitantes a peligros potencialmente letales, como el riesgo de electrocución.
Durante la última lluvia, registrada ayer jueves, el agua inundó las inmediaciones de las oficinas de atención permanente, donde la corriente eléctrica se combinó con las filtraciones, generando chispas y pequeñas explosiones en las instalaciones eléctricas. Estos incidentes causaron pánico entre los funcionarios, quienes se vieron obligados a evacuar de manera precipitada. Las escenas de cables chispeando y agua que brota del techo fueron grabadas en video y rápidamente se difundieron en redes sociales, despertando el reclamo de los usuarios judiciales y de la ciudadanía.
La situación ha generado molestia y frustración entre abogados y funcionarios judiciales, quienes lamentan la falta de acción de las autoridades de la Corte Suprema de Justicia y de la Sexta Circunscripción Judicial de Alto Paraná. “Llueve más adentro que afuera, increíble”, se escucha en uno de los videos grabados en el interior del edificio, en el que se observa cómo el agua ingresa sin cesar a través del techo de PVC. La constante exposición al peligro y la incomodidad que esto genera en el personal y los usuarios de la sede judicial han sido motivo de reclamos reiterados. Sin embargo, hasta la fecha no se han implementado soluciones efectivas.
Inaugurado en octubre de 2020, el Palacio de Justicia de Ciudad del Este fue presentado como la obra de infraestructura judicial más grande del país. Con una superficie de 46.754 metros cuadrados y construido en el marco de un proyecto del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Paraguay, el edificio alberga tribunales de apelación, juzgados de primera instancia, salas de juicios orales, y varias oficinas de apoyo jurisdiccional y administrativo.
Su inauguración se llevó a cabo en coincidencia con el cumpleaños de la entonces ministra de la Corte Suprema de Justicia, Gladys Bareiro de Módica, quien ejercía la superintendencia de la Sexta Circunscripción Judicial. La rapidez de la finalización de la obra fue vista como una estrategia para presentar resultados en una fecha especial, lo que algunos consideran que pudo influir en la calidad de los acabados y la estructura del edificio.
RECLAMAN SOLUCIÓN
La comunidad jurídica de Ciudad del Este exige una revisión exhaustiva de la infraestructura del Palacio de Justicia y acciones inmediatas para corregir las deficiencias que ponen en riesgo la seguridad de los usuarios y el personal.
El riesgo eléctrico y las inundaciones constantes han hecho de este edificio un espacio inadecuado para la función judicial y un peligro latente para todos los que deben utilizar sus instalaciones. Ante esta situación, los abogados y funcionarios esperan que la Corte Suprema de Justicia responda con celeridad y disponga la solución del problema que debería haber sido atendido antes de la entrega de una obra de tal envergadura.
