Decenas de vertederos clandestinos de basura se observan en algunos barrios de Ciudad del Este, creados por ciudadanos “puercos” que no quieren pagar el servicio de recolección de residuos domiciliarios. Unos vecinos preocupados por esta situación escribieron a La Clave y esperan el actuar de la gente de la Municipalidad. “A nosotros no nos hacen caso”, refirió Mario Leguizamón, del barrio Ñasaindy.
Comentan que los que arrojan la basura son mayormente personas que se dedican a recoger los desechos en motocarros, cobran un incentivo y se deshace de los residuos en cualquier espacio baldío de los barrios. Esta actividad se realiza a un horario menos concurrido y luego otros que no saben qué hacer de las malezas acumuladas, deciden quemar en horario nocturno.
Es más, mucha carga sin pagar de un lugar no lleva los recolectores, argumentaron y la consecuencia negativa que atrae el hecho, es que el humo de la quema arrasa por toda la vecindad y ensucia las ropas que se extienden en los patios y balcones. La práctica de quemar basura está prohibida por ordenanza municipal y hacerla cumplir, es el factor pendiente de los funcionarios.
