El 10 de agosto se celebra en Paraguay el Día del Veterinario, una ocasión para reconocer la labor esencial de los profesionales que se dedican al cuidado y bienestar de los animales. En el marco de esta celebración, tuvimos la oportunidad de conversar con el Dr. Ramón Sosa, destacado veterinario de la región, sobre los avances y desafíos en la profesión veterinaria, así como sobre las conmemoraciones del día.
Para el Dr. Sosa, el Día del Veterinario es una fecha de gran significado. «Este día conmemora el cuidado de los animales. La palabra ‘veterinario’ proviene del latín “veheri”, que significa ‘tirar’. Originalmente, los veterinarios eran quienes cuidaban de los animales que tiraban de los carros y carretas. Es una fecha para celebrar y reflexionar sobre nuestro compromiso con el bienestar animal», explica. La conmemoración en Alto Paraná se llevará a cabo en una churrasquería local, con la participación de la Asociación Nacional de Veterinarios de Pequeños Animales de Alto Paraná (ANVEPAAP).
En cuanto a los avances en la medicina veterinaria, el Dr. Sosa destaca que «hemos visto desarrollos significativos en áreas como diagnóstico, tratamiento y técnicas de cuidado. Desde resonancias magnéticas y tomografías computarizadas hasta análisis genéticos y fisioterapia, estos avances permiten ofrecer una atención más precisa y efectiva a los animales».
Sin embargo, la profesión veterinaria también enfrenta desafíos, especialmente en términos de educación pública. “Uno de los mayores retos es educar a la población sobre el cuidado adecuado de sus mascotas y la importancia de consultar a un profesional. A medida que avanzamos, es nuestra responsabilidad enseñar y concienciar», señala el Dr. Sosa.
La percepción de la medicina veterinaria ha mejorado en la última década, pero aún queda mucho por hacer. El Dr. Sosa menciona que “aunque hemos avanzado, es crucial seguir educando a la población para evitar prácticas empíricas que pueden poner en riesgo la vida de las mascotas».
Los veterinarios desempeñan un papel fundamental en la promoción del bienestar animal y la salud pública. “No solo trabajamos para mejorar la salud y calidad de vida de los animales, sino que también velamos por la seguridad alimentaria y la prevención de enfermedades zoonóticas que pueden afectar a los humanos”, afirma el Dr. Sosa.
Entre los casos más memorables en su carrera, el Dr. Sosa recuerda uno en particular que marcó una diferencia significativa. “Hace unos años, tratamos a una mascota con una luxación de columna. A pesar de que la dueña no podía cubrir los costos, logramos realizar la cirugía con un acuerdo especial. Ver a ese animal recuperado y feliz con su dueño es un ejemplo de por qué elegí esta profesión”, cuenta con orgullo.
Para los jóvenes interesados en la medicina veterinaria, el Dr. Sosa ofrece un consejo: «Es una carrera apasionante y gratificante, pero requiere una preparación sólida. Es esencial ser capaz de interpretar correctamente a los pacientes y comunicar efectivamente con los propietarios para proporcionar el mejor cuidado posible».
Mirando hacia el futuro, el Dr. Sosa tiene esperanzas optimistas. “Creo que el futuro de la medicina veterinaria en Paraguay es prometedor. Mi deseo es que podamos establecer un hospital veterinario de 24 horas en Ciudad del Este, donde los profesionales puedan ofrecer atención continua y especializada”. En este Día del Veterinario, el Dr. Sosa y sus colegas celebran no solo los avances alcanzados, sino también el compromiso continuo con el bienestar animal y la salud pública en Paraguay.
