El segundo criminal más buscado del país, detenido la madrugada del pasado viernes en Sidepar 3.000, departamento de Canindeyú, recorrerá unidades fiscales y juzgados del país, donde tiene procesos por hechos graves. Una comitiva encabezada por el fiscal Alfredo Acosta, de la zonal Yguazú, y agentes contra el crimen organizado de la Policía, lograron asegurar al escurridizo marginal, que ya empezó a responder procesos.
“Hasýpe aperdé”, fue lo primero que dijo el criminal Héctor Paredes Ramírez, alias “Ko’olo”, cuando fue sorprendido por la comitiva fiscal-policial. El marginal es buscado por la fuerza pública desde hace casi dos décadas, cuando habría iniciado su carrera delictiva, que incluye casos de robos agravados, asalto a camiones transportadores, a carros fuertes y hasta homicidios dolosos.
“Ko’olo” había sido declarado rebelde por el juez penal de garantías Carlos Vera Ruiz, a pedido de fiscal Alfredo Acosta, del distrito de Yguazú, en imputación por robo agravado en grado de tentativa con resultado de muerte.
CASOS EN TODO EL PAÍS
El delincuente lideraba una banda criminal que tiene en su haber, según la Policía, sucesivos y violentos atracos armados. El 19 de diciembre de 2020, en plena pandemia, uno de sus grupos, tomó por asalto la “Distribuidora San Blas”, del distrito de Juan León Mallorquín, donde había contado con el soporte informático del guardia del local, Rafael Ayala González, quien resultó procesado como cómplice en el caso.
Los criminales fueron sorprendidos por investigadores de la Policía en plena faena, por lo que llevaron de rehén al trabajador Jaime Rodrigo Bobadilla Sánchez para proteger su vida. El mismo fue abandonado en el monte cuando una colonia de abejas se abalanzó contra los malvivientes y el funcionario fue abandonado en el sitio, donde perdió la vida, a consecuencia de las picaduras.
En esa ocasión, la banda liderada por “Ko’olo” tuvo una baja, ya que en la refriega con la Policía cayó herido de muerte, Benicio Paredes Ramírez, hermano menor del ahora detenido. De hecho, el criminal debió ingresar a la penitenciaría regional por el caso de la distribuidora de Juan León Mallorquín, pero antes deberá ser presentado en todos los juzgados y las unidades fiscales que lo requieren, por el protocolo.
