
Una mujer en aparente estado de ebriedad o inclusive drogada protagonizó un violento episodio al golpear a una conductora de la plataforma Bolt. Como si fuera poco, provocó destrozos en el rodado de la víctima y de otro colega que llegó al sitio para ayudar a la víctima. Tras el incidente, la Policía detuvo a la mujer y quedó a disposición del Ministerio Público. El suceso ocurrió alrededor de las 23:00 en la estación de servicios Copetrol, situada sobre la avenida San José y la calle Juan Martinich de Ciudad del Este.
Se trata de Liz Mariana Pereira Orrego, de 20 años, quien quedó detenida en la comisaría 25ª de Mujeres. Según el sistema informático de la Policía Nacional, la misma posee orden de búsqueda y localización.
Los datos indican que ella solicitó un viaje a través del aplicativo Bolt. La conductora Micaela Anahí Rojas Villalba (29) acudió a buscarla al mando de un automóvil Toyota Ractis. La misma subió al auto y cambió el trayecto varias veces hasta que finalmente pidió ingresar al mencionado surtidor.
Aprovechando la ocasión, la conductora le preguntó dónde mismo lo que quería irse. Eso molestó a la mujer, quien empezó a gritar y golpear el tablero del auto. Como si fuera poco, también propinó un puñetazo en la nariz de la víctima, causándole un sangrado nasal. Inmediatamente llegó al lugar otro conductor de la misma plataforma, identificado como Cristhian Colmán, con la intención de auxiliar a su compañera y logró reducir a la supuesta agresora. Durante el incidente, la descontrolada pasajera agarró una piedra y rompió el parabrisas delantero de los dos vehículos.
CONFLICTO
En cuestión de minutos, varios trabajadores de aplicativos rodearon a la mujer hasta que llegaron los agentes de la comisaría 7ª del barrio San José. Allí se armó un conflicto entre los uniformados y los conductores de aplicativos, porque estos exigían que la mujer sea esposada, pero los uniformados no lo hacían. En medio a la escaramuza, nuevamente la mujer tomó una piedra y volvió a arrojar una piedra contra otro automóvil. En ese momento, los ánimos se caldearon y el problema ya era entre los trabajadores y la Policía porque se empezaron a empujar y por poco no llegaron a los golpes. Finalmente, la mujer fue esposada y trasladada a la base policial, donde se realizó el procedimiento de rigor.
Luego el caso fue comunicado a la fiscal Cinthia Leiva, quien dispuso que la autora del violento episodio quede recluida en la comisaría 25ª de Mujeres, en la Dirección de Policía del Alto Paraná.