
Entre el viernes, sábado y domingo último se presentaron en el Hospital Regional de Ciudad del Este 22 casos de atenciones por motivo de accidentes, distribuidos entre motociclistas y automovilistas de la región. Cada fin de semana se reciben los casos urgentes de este asunto, que acaparan las camas del centro asistencial. El reporte podría elevarse aún más, teniendo en cuenta que, ayer lunes, era feriado y mucha gente aprovechó para farrear.
El director del nosocomio regional, Federico Schrodel, comentó los casos que llegan a consecuencias de los accidentes, son urgentes de atender, debido a que algunos pierden sangres por diferentes golpes. Lamentó que sigan creciendo los números de accidentes y que altera bastante el orden de atención médica. Cabe recordar, que en dicho lugar asisten pacientes de diferentes patologías, que sortean disponibilidad de espacios para el tratamiento.
“En casi cada fin de semana y feriados recibimos a pacientes accidentados que le brindamos la asistencia médica requerida, pero también tenemos a los que vienen por otras enfermedades y nos esforzamos para abastecer a todos”, resaltó el director. Esta cifra de 22 accidentados que acudieron al hospital podría elevarse más, ya que ayer fue cumplido el feriado del 12 de junio, Día de Paz del Chaco, con decreto presidencial tuvo modificación de conmemoración.
Es preciso informar que la mayoría de estos casos fueron dados de alta, luego de brindarles la inspección médica, alegó el doctor. Se llama la atención, a la falta de responsabilidad de los conductores de cualquier rodado, últimamente se ven los accidentes que ocurren por imprudencia vial o por efecto del alcohol. El médico insta a la ciudadanía a tomar cuidado cuando sale a la calle. Ocurren accidentales que se pueden evitar, recalcó.
DESORDEN
Vale comentar que en las rutas se observa un desorden vial cometido por varios conductores. Las señales de tránsitos parecen estar pintadas de adornos en las calles. En muchos sectores de CDE y alrededores existen los giros a la izquierda sobre las avenidas principales, pero nadie respeta las franjas y se terminan encimando todos en las bocas calles. Así bloquean totalmente el doble sentido.
La falta de respeto hacia las normas de tránsito es sinónimo fuerte que ocurran accidentes vehiculares. Tampoco se impone un control estricto por partes de las policías municipales y camineras, para sancionar a los infractores. Mientras siga el “permiso” o desinterés de los órganos del Estado, seguirán ocurriendo los accidentes, lastimosamente.