El cuestionado empresario y político colorado Abundio López, molesto por las publicaciones de La Clave, estaría utilizando al seudo periodista César Díaz, denunciado años atrás por extorsión y coacción grave para inventar falsedades sobre el director de La Clave y tratar de “embarrarlo”. Lejos de conseguir el objetivo, lo que hace Díaz, quien funge de supuesto periodista en redes sociales, pero no trabaja en ningún medio formal, solo desnuda la “pichadura” de su mandante Abundio López, quien le estaría pagando un poco de dinero para despotricar contra la dirección de este diario.
Como no tiene elementos para refutar las publicaciones de La Clave, el empresario y político colorado Abundio López, condenado por la otrora Subsecretaría de Estado de Tributación (SET) por millonaria evasión de impuestos en el 2017, habría contratado los “servicios” de Díaz, un seudo periodista que opera en redes sociales, hijo del experiodista Flaviano Díaz, quien también acumuló denuncias por su corrupta gestión al frente de Radio Nacional del Paraguay y más recientemente hasta tuvo problemas con la dueña del alquiler en donde vive, por falta de pago.
En su página de Facebook y otras redes sociales, César Díaz propala una sarta de mentiras y difamaciones contra el director de La Clave, tratando de colocarlo en el mismo pedestal de su contratante Abundio López, quien sí fue multado por el fisco. Sin embargo, la dirección de La Clave cuenta con todos los documentos que no adeuda absolutamente al fisco, documentación que gustosamente le podemos remitir a Díaz, aunque no tendría relevancia por ser este un insignificante en el ruedo periodístico.
El seudo periodista es bastante conocido por aceptar este tipo de “trabajos sucios”, buscando embarrar a la “contraparte” del pagador de turno, como lo es en este caso Abundio López. En abril de 2021, en la unidad de la agente fiscal Cinthia Leiva se procesó una denuncia formulada por el abogado Rolando Cáceres Salvioni contra César Díaz, sindicándolo como responsable de hechos punibles contra el patrimonio y la libertad de las personas. Según el escrito de denuncia, Díaz lo habría llamado a su teléfono celular comentándole que habría sido contratado para realizar sendas publicaciones que podrían dañar su reputación laboral y familiar y ofreciéndole informaciones confidenciales referentes a una causa penal abierta contra un precandidato colorado a la intendencia municipal de Ciudad del Este.
El comunicador le habría solicitado sumas de dinero a cambio de omitir las publicaciones, hasta que el 4 de enero de ese año, ante la insistencia de Díaz, el letrado hizo un giro de un determinado monto de dinero, alegando que no estaba en condiciones emocionales para soportar publicaciones malintencionadas. Luego de recibir el dinero, el denunciado habría publicado en su página digital un audio sin la autorización del denunciante en el que también involucra a la abogada Gloria Vera, buscando ensuciar a Cáceres Salvioni, quien decidió accionar judicialmente contra Díaz.
LO QUE MOLESTÓ A ABUNDIO LÓPEZ
La gota que habría “colmado el vaso” y que hizo que López contratara al seudo periodista mercenario para despotricar contra el director de La Clave es la publicación sobre el uso ilegal del perímetro del tendido energético de alta tensión de la ANDE en el km 8 Acaray de Ciudad del Este, en donde utiliza esta área sensible como “depósito de materiales que utiliza para ejecutar trabajos para precisamente la ANDE”, frente mismo a su residencia. Cabe recordar que está prohibido instalarse u ocupar esas áreas, sin embargo, eso poco y nada le importa a López.
Abundio López es un empresario de muy cuestionada trayectoria, sin embargo, eso no le impide de acaparar jugosas licitaciones en la ANDE, a través de sus empresas, San Francisco Emprendimientos S.A y su unipersonal ALI (Abundio López Ibarra), por valor de casi G. 15.000 en poco más de dos años, según consta en los registros oficiales de contrataciones y licitaciones de la ANDE.
El hecho de que López haya sido condenado por la SET por millonaria evasión impositiva no ha impedido que el mismo siga ganando licitaciones en la ANDE, presuntamente con la importante ayuda del propio presidente de la estatal, Félix Sosa, quien además de ser su amigo, sería su socio comercial en diversos negocios.
En el 2017, López fue condenado por la SET por millonaria evasión impositiva. En aquel año se descubrió que el influyente empresario esteño había utilizado facturas falsas por unos G. 2.000 millones a fin de evadir impuestos. La multa establecida fue del 300%, es decir, López debió pagar al menos G. 6.000 millones, pero mediante su influencia política, ha abonado apenas la mitad de lo establecido, según los datos.
Y, para colmo, para “deslindar responsabilidades y echar la culpa a otro, López decidió formular denuncia por producción de documentos no auténticos contra su contador, Adrián Benítez, en un intento por desviar la atención, pese a que los profesionales no pueden ser responsabilizados del movimiento financiero de sus clientes.
Tampoco hay que olvidar que el “exitoso” empresario evasor de impuestos tiene un hermano con un rosario de antecedentes por narcotráfico. Se trata de Carlos Antonio López Ibarra, quien cayó preso en el año 2019 como responsable de un cargamento de más de 5 mil kilos de marihuana, que tenía como destino la Argentina y Chile. A propósito, el citado ya contaba con una condena de 12 años justamente por traficar drogas de Paraguay a Chile, según los antecedentes, por lo que no se descarta que gran parte de la fortuna de esta familia provea de actividades ilícitas, como el narcotráfico y la evasión de impuestos.