La Policía Federal de Brasil procedió a incinerar más de 8 toneladas de drogas incautadas en los últimos meses en la región fronteriza con Paraguay y Argentina. Esta operación representa la segunda incineración realizada este año, elevando a más de 16 toneladas de drogas destruidas.
La cantidad de droga proviene de acciones anticontrabando realizada en Foz de Yguazú y otros municipios de la región, especialmente en áreas cercanas al río Paraná y al lago de Itaipu. La operación se llevó a cabo el pasado en una industria metalúrgica, donde se utilizó un horno industrial para la destrucción de los estupefacientes.
El convoy, compuesto por patrulleras, dotado con armas de grueso calibre, partió de la sede la Policía Federal hasta la planta industrial. Allí, en un ambiente de estricta seguridad, se procedió a la incineración de las drogas, que incluían panes de marihuana, cocaína, hachís, pasta base y skank.
Las autoridades destacaron que una gran parte de los estupefacientes incautados fue resultado de patrullajes integrados entre las fuerzas de seguridad de Brasil, Paraguay y Argentina, lo que demuestra la importancia de la cooperación internacional en la lucha contra el narcotráfico.
Entre los operativos más recientes, se destaca la incautación de 650 kilos de marihuana realizada en la madrugada del viernes 10 de mayo. Los agentes de la Policía Federal, durante un monitoreo en el río Paraná, observaron una embarcación cruzando desde Paraguay hacia Brasil y atracando en un puerto ilegal. En el lugar, se encontró un vehículo cargado con varios fardos de la droga.
Pese a que el conductor del vehículo logró escapar del control policial, la droga fue incautada y llevada a la comisaría. Esta acción se suma a la serie de golpes al narcotráfico que la Policía Federal ha llevado a cabo en la región fronteriza, asestando un duro golpe a las redes criminales que operan en la triple frontera.
La incineración de las drogas incautadas es un acto simbólico que representa el compromiso de la Policía Federal con la lucha contra el narcotráfico. Sin embargo, las autoridades reconocen que la batalla contra este flagelo es constante y requiere de un trabajo permanente y coordinado entre las diferentes fuerzas de seguridad.
En este sentido, reiteraron la importancia de la colaboración ciudadana para denunciar actividades sospechosas y contribuir a la prevención del tráfico de drogas en la región de la triple frontera. Insisten en que la lucha contra el narcotráfico es una responsabilidad de todos, y solo con el trabajo conjunto de las autoridades y la sociedad se podrá lograr un futuro libre de este flagelo concluye en un comunicado oficial divulgado.
