La transparencia en la gestión pública es un pilar fundamental de la democracia y es, precisamente, en los niveles municipales donde esta premisa adquiere una importancia aún mayor, ya que impacta directamente en la calidad de vida de los ciudadanos. En este sentido, es necesario abordar con seriedad y responsabilidad el manejo de las adjudicaciones de obras por parte de las autoridades locales, como es el caso de la Municipalidad de Presidente Franco.
El reciente señalamiento del concejal Hugo Mendoza (ANR) sobre el manejo informal de las adjudicaciones de obras por parte del intendente Roque Godoy y su mayoría en la Junta Municipal es motivo de preocupación para la comunidad. Mendoza destaca la falta de criterios claros de prioridad y necesidad en la asignación de recursos, lo cual resulta especialmente preocupante dada la naturaleza limitada del presupuesto municipal.
Es innegable que la ejecución de obras de infraestructura puede ser vital para el desarrollo y bienestar de una comunidad. Sin embargo, es imperativo que estas decisiones se tomen de manera transparente y en base a las verdaderas necesidades de la población. El llamado a licitación para introducir mejoras en la plaza La Libertad, cuestionado por Mendoza, es un ejemplo de cómo la falta de transparencia puede conducir a una asignación ineficiente de recursos públicos.
Es fundamental que el ejecutivo municipal cumpla con su obligación de presentar el programa anual de contrataciones, un documento que anticipa los planes y proyectos de obras a ejecutar en la ciudad. Este proceso garantiza que las decisiones de adjudicación se tomen de manera informada y en consonancia con las prioridades y necesidades reales de la comunidad.
La falta de cumplimiento de esta obligación legal por parte del municipio es motivo de preocupación y debe ser corregida de manera urgente. Los ciudadanos tienen derecho a conocer cómo se gestionan los recursos públicos y a exigir que se haga de manera transparente y conforme a la ley.
Es importante destacar que estas preocupaciones no son nuevas. En el pasado, el intendente Roque Godoy ha sido objeto de señalamientos por irregularidades en licitaciones y adjudicaciones de obras. Sin embargo, lo preocupante es que, a pesar de estas denuncias, no se han observado medidas correctivas significativas por parte de las autoridades municipales. Esta falta de acción refuerza la percepción de impunidad y falta de rendición de cuentas, minando la confianza de la ciudadanía en las instituciones locales.
La repetición de estas prácticas opacas y la falta de respuesta por parte del ejecutivo municipal no solo socavan la confianza en la administración pública, sino que también representan un obstáculo para el desarrollo sostenible y equitativo de la comunidad. Es hora de que el intendente y su equipo asuman su responsabilidad con seriedad, adoptando medidas concretas para garantizar la transparencia y la legalidad en todas las etapas de los procesos de adjudicación de obras municipales.
Es responsabilidad de todos los actores involucrados en la gestión municipal, desde el intendente hasta los concejales, garantizar que las adjudicaciones de obras se realicen de manera transparente y en beneficio de la comunidad en su conjunto. Solo a través de un compromiso real con la transparencia y la legalidad se puede construir una sociedad más justa y equitativa.
En este sentido, se insta al ejecutivo municipal de Presidente Franco a tomar medidas inmediatas para garantizar la transparencia en las adjudicaciones de obras y cumplir con las normativas establecidas. La confianza de los ciudadanos en sus autoridades depende de ello, y es un elemento indispensable para el fortalecimiento de la democracia local.