La Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay (ESSAP) enfrenta un problema recurrente: el hurto de medidores de agua. Según cifras de la estatal, en los últimos 5 meses ya se robaron alrededor de 100 artefactos, generando importantes pérdidas y afectando la prestación del servicio.
Wilson Franco, administrador del ente, explicó que el robo de medidores implica la paralización del servicio de agua potable hasta que la ESSAP reponga el dispositivo. “Es una realidad que nos aqueja bastante en el sector del barrio Pablo Rojas y avenida Sauce de Ciudad del Este”, lamentó.
La empresa se encuentra en proceso de realizar denuncias en las comisarías jurisdiccionales. “Estos medidores no sirven a terceras personas porque son propiedad de la ESSAP”, indicó el funcionario.
Los aparatos, fabricados con fibra, plástico y un porcentaje menor de cobre, son arrancados y hurtados, presuntamente, por personas adictas. “Cada medidor tiene un valor de 180 mil guaraníes, lo que representa una pérdida significativa para la empresa y un perjuicio para los usuarios”, sostuvo Franco.
