La insostenible inseguridad que se vive actualmente en el Alto Paraná llegó a su pico máximo ayer cuando dos motochorros mataron de un balazo a un comerciante durante un violento asalto registrado alrededor de las 12:45, en el barrio San Isidro de Ciudad del Este. Los bandidos llegaron disparando e hirieron en el corazón al dueño de una joyería, luego se alzaron con joyas y se dieron a la fuga. Tras una persecución, los infelices fueron atrapados a orillas del río Monday, en Presidente Franco. Del poder de los mismos se incautó un arma de fuego y dinero de baja denominación, además de la moto que utilizaron para el atraco, pero las joyas no fueron halladas. Justamente, el martes, autoridades locales pidieron la declaración de emergencia departamental ante la galopante ola de asaltos y la intervención de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC).
La primera víctima fatal en el Alto Paraná de esta inseguridad reinante en lo que va de este año 2024 es el comerciante Ever Antonio Castellani Aquino, de 42 años, domiciliado en vida en el lugar del hecho, situado en el km 6,5,, barrio San Isidro de Ciudad del Este. La víctima se dedicaba a la venta de joyas a través de las redes sociales y, el martes en horas de la mañana, un sujeto se contactó con la pareja del ahora fallecido vía WhatsAap, diciendo estar interesado en una cadena de oro.
Ayer, aproximadamente a las 12:45, este mismo hombre se volvió a contactar con la mujer, y le dijo que estaba llegando a su local para mirar el producto y comprarlo en caso de que le gustaba. Castellani Aquino abrió la puerta de su vivienda y salió a la calle en compañía de la mujer de nombre, Vilma Beatriz Godoy Castro, de 34 años, esperando al supuesto cliente, cuando de repente vieron a dos sujetos acercándose a bordo de una moto. La mujer se percató de lo que podría pasar y entró corriendo, seguido por su pareja, como para cerrar la puerta, cuando fue baleado en el corazón.
Ya herido, el comerciante trató de trancar la puerta, pero cayó al suelo y los delincuentes ingresaron al interior del local, y uno de los marginales, sin piedad alguna, empezó a revisar los bolsillos de la víctima que ya estaba agonizando en el suelo. En tanto, el otro se apoderó de varias joyas de oro y plata para luego darse a la fuga a bordo de una motocicleta de la marca Kenton GTR, de color rojo, sin chapa.
Los bandidos emprendieron una alocada fuga cruzando varios barrios de Ciudad del Este y Presidente Franco hasta que fueron visualizados por agentes de la subcomisaría 12ª, y estos pidieron refuerzos de agentes del Grupo Lince, Patrulla Motorizad, y agentes del Departamento de Investigaciones.
Los bandidos abandonaron su motocicleta y continuaron su huida a pie en medio a un intercambio de disparos que terminó cuando la Policía logró reducir a los presuntos autores, en la fracción Cerro Corá, del barrio San Miguel de Presidente Franco, ya a orillas del río Monday
DETENIDOS
Los detenidos están identificados como Hernán Ariel Leguizamón Roa, de 25 años, quien cuenta con antecedente por robo agravado en grado de tentativa, con prohibición de salir del país y prohibición de acercarse a la víctima. El otro es Adrián Ramón Cabral Candia, de 26 años, domiciliado en el km 4 Monday de Pdte. Franco. El mismo cuenta con antecedente por robo agravado, con prohibición de salir del país. En otra causa por robo cuenta con libertad condicional y tiene prohibición de consumir bebidas alcohólicas y portar armas de fuego.
EVIDENCIAS INCAUTADAS
Del poder de los infelices fue incautada una motocicleta de la marca Kenton GTR, color rojo, sin chapa, denunciada como robada en la jurisdicción del puesto policial nº 5, del km 9 Monday, por su propietario Marcelo Daniel González, de 28 años. Asimismo se requisó un revólver, cal. 32mm, con mango de goma, de la marca Italo, y otro revólver cal. 38mm. Además, tenían en su poder dinero de baja denominación, que sería producto del hecho. Lo que los intervinientes no encontraron fueron las joyas, pues durante la fuga los marginales habrían arrojado las evidencias.
CIRCUITO CERRADO
El lugar donde ocurrió el asalto mortal cuenta con circuito cerrado de seguridad, cuyas imágenes relatan paso a paso todo lo que ocurrió en varios ángulos. Dichos materiales visuales serán fundamentales para que el agente fiscal de turno Julio Paredes pueda procesar y solicitar la prisión de estos delincuentes que, a sangre fría, acabaron con la vida de un comerciante que a diario se esforzaba trabajando para mantener a su familia.