El Instituto de Previsión Social (IPS) de Ciudad del Este sigue albergando a muchos médicos planilleros y haraganes, pero perciben remuneraciones millonarias, mientras los asegurados y pacientes claman a diario por las múltiples carencias existentes en la previsional. Entre estos, se pueden mencionar los casos de los doctores Carlos Pallarolas, excandidato a gobernador de Alto Paraná por Fuerza Republicana, y el Dr. Hugo Casartelli, considerado uno de los líderes del nepotismo esteño, ya que ubicó también a toda su parentela con jugosos cargos. Otra que siempre está bien posicionada es la Dra. Ana Liz Jara, quien hasta hace poco era “asesora” de IPS, con un salario de más de G. 13 millones, aunque ahora fue comisionada como nueva directora de la previsional en Pdte. Franco, en donde sí estará obligada a trabajar.
Es sabido que el IPS de Ciudad del Este es una de las principales instituciones en donde el planillerismo y el nepotismo están a la orden del día. En muchos casos, se trata del pago de favores políticos, como el del Dr. Carlos Pallarolas, excandidato a gobernador por el movimiento Fuerza Republicana. El mismo figura como supuesto asesor, con un salario de unos G. 10 millones, pero no cumple ninguna función específica en el ente, conforme con las fuentes. Quedan pocas dudas de que su status de excandidato de la ANR, quien, tras ser derrotado, inmediatamente reconoció la derrota y se puso “a las órdenes” del candidato ganador, hecho que le vale este privilegio.
Otro caso llamativo es el de la Dra. Ana Liz Jara, quien hasta hace poco también figuraba como “asesora” en el IPS, con un salario de más de G. 13 millones. La misma es exesposa del cuestionado diputado cartista Freddy Tadeo D’Ecclesiis y anteriormente ya había ocupados cargos en el hospital de la Fundación Tesãi, como presunto pago de favores políticos. Ahora la misma fue comisionada a la dirección del hospital del IPS en Pdte. Franco, en donde al menos deberá desempeñar alguna función específica y no podrá seguir “planilleando”.
Otro “privilegiado” en la previsional es el Lic. Guillermo Ramos Filizzola, jefe de “gestión de pacientes”, con un salario de G. 11 millones y es “inamovible” en el cargo, gracias al fuerte respaldo de políticos colorados esteños. De acuerdo con los datos, en teoría Ramos debería gestionar y velar por la calidad de la atención médica brindada en el hospital de CDE, así como gestionar quejas y reclamos de los asegurados, acceso a medicamentos y otros, sin embargo, es otro planillero más y los resultados de su trabajo son desconocidos, reportaron las fuentes a periodistas de este medio.
LÍDER DEL NEPOTISMO ESTEÑO
No se podría dejar de mencionar en la lista al considerado “líder del nepotismo esteño”, Dr. Hugo Casartelli, quien hace más de dos años dejó de trabajar para la institución, pero sigue figurando como “coordinador zonal de Alto Paraná”, con un nada despreciable salario de casi G. 10 millones. Casartelli es accionista de uno de los sanatorios privados más conocidos de CDE (sanatorio Central) y colocó a toda su parentela en la previsional, garantizando así el buen vivir de sus familiares.
Casartelli ubicó en la previsional a su esposa, Verónica Mayans de Casartelli, que se desempeña como cardióloga, de muy cuestionada labor y casi no se le ubica en consultorio. En tanto, su hermana, Silvana Casartelli, reumatóloga, funge de funcionaria en el IPS, pese a que su horario se sobrepone con el de la Fundación Tesãi, donde también presta servicios. El esposo de Silvana, Alejandro Patiño, también figura en la planilla del IPS de CDE, con un sueldo de más de G. 8 millones. Así, conforman un poderoso clan familiar, todos libando la fresca viruta, fruto del sacrificio de los trabajadores asegurados de la previsional.
Cabe recordar que, al asumir las nuevas autoridades del IPS, en setiembre del año pasado, prometieron “frontal combate” contra los planilleros dentro de la institución, sin embargo, a seis meses de esas promesas, está visto que la mayoría continúan campantes cobrando millonarios estipendios sin trabajar.