La ola de inseguridad no cesa en el Este del país. Ayer, cuatro delincuentes armados con pistolas irrumpieron en un surtidor del emblema Puma, situado sobre la Ruta PY07, en el barrio San Francisco de Hernandarias. Encañonaron al hijo del dueño y al cuñado de éste que acababan de llegar con la recaudación de otra estación de servicios. Los delincuentes pusieron a todos boca para abajo y se apoderaron de un millonario botín. El padre de la víctima, que estaba en la planta alta del local, se percató del hecho y realizó dos disparos de escopeta, haciendo que los marginales huyeran del sitio. El hecho ocurrió cerca del mediodía de ayer.
Según el informe de la comisaría 27ª del barrio San Francisco de Hernandarias, a la hora indicada, los delincuentes llegaron al sitio a bordo de un automóvil Volkswagen Gol sedan, de color blanco. Rápidamente ingresaron a la tienda de conveniencias donde estaban las víctimas, Richard David Ayala Alfonzo (27), domiciliado en el barrio Pablo Rojas, de Ciudad del Este, hijo del dueño del surtidor, quien estaba en compañía de su cuñado Raúl Aricio Román Paredes (35), domiciliado en el km 6,5 barrio San Isidro, quien tenía en su poder la recaudación de otro surtidor del emblema Copeg, situado en el barrio San José, de donde había retirado G. 22 millones, producto de la recaudación del fin de semana e iban a entregar al dueño del local para posteriormente depositar en un banco.
Las víctimas relataron que los bandidos ingresaron a la tienda dando la voz de asalto, obligándolos, junto con un playero a permanecer tendidos en el suelo boca abajo y les despojó del millonario monto, además de dos aparatos celulares de la marca iPhone, que terminaron arrojando durante la huida.
AUTO ABANDONADO Y QUEMADO
A unos 200 metros del lugar del asalto, los asaltantes abandonaron y quemaron el automóvil Volkswagen Gol sedan, color blanco, que utilizaron para el atraco. El rodado tenía placas CEH 453, correspondiente a un camión de la marca Iveco Daily, de color blanco, año 2005, registrado a nombre de Ricardo David Núñez Villalba. Los bandidos huyeron en otro vehículo y hasta anoche, los investigadores no tenían pistas de los autores.