El fraccionamiento de 40 hectáreas se aprobó sobre tablas el miércoles último en la sesión de la Junta Municipal, sin que siquiera se analice en comisiones. Fueron dos proyectos a pedido de la hermana del intendente, Nelson Cano, cuyo nombre es Ada Estela Cano Ozuna. Al parecer, el ejecutivo dio la orden a los concejales serviles para que no pierdan tiempo y aprueben en el mismo día del mensaje. La mayoría de los ediles respondió a su pedido.
El pedido de la aprobación de los fraccionamientos ingresó por mensaje en el pleno legislativo. Fueron dos lotes de 20 hectáreas cada uno y están situados en la colonia Acaray de Hernandarias. Un proyecto figuró en el orden 13 del punto que corresponde a mensajes, el otro ni siquiera se anotó, llamativamente, en el orden del desarrollo de la sesión de la Junta Municipal.
Sin derivar a comisiones para su estudio, el presidente de la Junta, Julio Escobar, propuso para que se apruebe sobre tablas, por lo que la mayoría dio su respaldo. Aprobaron los colorados Julio Escobar, Jhon Florentín, Celestino González, Yessica Caballero, David Monzón, Milciades Dávalos y Alcides Azcona, este último independiente, pero responde a la ANR. En disidencia, votaron Germán Ibarrola, Nilda Venialgo (Indep.), Gerardo González, Rosa Ojeda y Alberto Báez (PLRA), con el resultado de 7 contra 5.
“La mayoría gana en democracia, pero yo particularmente no accedí al documento y prefiero no apoyar la aprobación. Por lo que veo, los otros tampoco tuvieron accesos e hicieron constar en acta su desacuerdo”, dijo Alberto Báez. Por la forma que se aprobó en el legislativo comunal, da a entender que la mayoría solo acató la orden del intendente Cano para dar curso al fraccionamiento.
ANTECEDENTES OSCUROS
Justamente existen negros antecedentes por las aprobaciones de fraccionamientos en Hernandarias, que generaron severas consecuencias con los clientes de las inmobiliarias. Una de ella, es la que está en la colonia Feliz de Azara, Raíces Real State, que tuvo denuncias de graves delitos contra el medio ambiente y que fue aprobada a ciegas por los concejales.
Es más, se cuestionó que ni siquiera pasó por la Junta Municipal, pero luego la firma presentó un documento que indicaba que los concejales aprobaron en sesión ordinaria dicho loteamiento. Tal situación puso en “aprieto” a los propios ediles que tuvieron un áspero debate en pleno desarrollo de la sesión.
Esa vez, se presentaron los compradores de los terrenos denunciando que se vendieron hasta las franjas costeras que deberían ser protegidas por la Ley, pero que los concejales se prestaron al negociado. Existen antecedentes que no juegan muy a favor de los legisladores y ahora nuevamente aprobaron un fraccionamiento a favor de la hermana del intendente de forma acelerada.