David Riveros, de la organización reAcción Paraguay, señaló que están monitoreando de cerca el proyecto de ley que busca universalizar la alimentación escolar y desfinanciar varios programas estatales. Anticipó que, en principio, lo que se puede observar es la falta de claridad. Mencionó que la presentación del proyecto deja muchas preguntas sin respuesta. Reconoció que existe consenso en que el país debe contar con los recursos suficientes para que ningún niño y niña pase hambre.
Por su parte, la jefa del Gabinete Civil de la Presidencia, Lea Giménez, señaló que los programas exitosos de investigación, educación y salud no se verían afectados. “Desaparecerían programas como BECAL, el arancel 0 en universidades, la infraestructura educativa, los fondos para el CONACYT, el fondo nacional para la salud, los recursos para el tesoro nacional y para la capitalización de la AFD (Agencia Financiera para el Desarrollo)”.
Además dijo que no hay una explicación clara sobre de dónde se obtendrían los recursos para estos temas que ya no tendrían financiamiento con la nueva ley propuesta por el presidente Santiago Peña.
Riveros manifestó que desde reAcción observan con preocupación la desconexión entre la solución propuesta y el problema. Destacó que hay muchas ideas de distintas organizaciones dentro y fuera del Gobierno que han estado trabajando sobre este tema durante 10 años.
Acotó que eventualmente el Ministerio de Educación deberá asumir esos gastos, no solo de investigación sino también de otros temas, y planteó la interrogante sobre de dónde se sacarían esos recursos.
Añadió que escuchó que para la infraestructura se estaba hablando de un préstamo del Banco Mundial, pero refirió que estos préstamos ya venían del Gobierno anterior. También mencionó que Giménez habló sobre un incremento en las tributaciones debido a la reducción de la evasión fiscal, pero mencionó que cualquier persona que esté siguiendo la economía del país sabe que los recursos no son suficientes y que no hay otras fuentes, a menos que se empiece a hablar de nuevos impuestos. Expresó que, si no se plantea un nuevo impuesto, salvo que el país se endeude más, no ve de dónde se pueden generar más recursos.
Insistió que el proyecto impulsado por el Gobierno de Peña, eliminando totalmente el Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide) para dar paso al Fondo Nacional de Alimentación Escolar (Fonae), en la forma en que está redactada, no soluciona muchos de los problemas que supuestamente identifica.