El precio del combustible y la carne registran un importante aumento en la ciudad de Puerto Yguazú, Argentina. El incremento oscila entre el 30% y el 40%, lo que hizo que en cuestión de días se redujera la fila de paraguayos y brasileños con intenciones de realizar compras en la vecina localidad.
Es tanta la fluctuación del peso que los supermercados decidieron dejar de poner precios de los productos que hacen a la canasta familiar. Paralelamente, la secretaría de bioeconomía del Gobierno Federal argentino anunció que está buscando un acuerdo con frigoríficos y grandes minoristas para limitar el aumento en los precios de los cortes de carne más populares para las festividades de fin de año.
Los datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) indican que el costo de la Canasta Básica Total (CBT) aumentó un 13.1% en noviembre en Argentina, mientras que solo la Canasta Básica Alimentaria (CBA) aumentó un 15.2%. Estos índices aún no contabilizan los aumentos ocurridos en el actual gobierno, que comenzó el 10 de diciembre.
El aumento del precio de la carne es un problema que afecta a todos los argentinos, pero es especialmente grave para las familias de bajos ingresos. La carne es una fuente importante de proteínas y nutrientes, y su aumento de precio hace que sea más difícil para estas familias alimentarse adecuadamente. El Gobierno argentino está tomando medidas para tratar de contener el aumento de los precios, pero es probable que la situación continúe siendo difícil en los próximos meses.
