Tribunal emitió condena “simbólica” contra “Mbururu” Esquivel

Rafael Esquivel, “Mbururu”, condenado a dos años de cárcel.

Al concluir la décima sesión de debates en el marco del juicio oral y público que sentó al frustrado senador Rafael Esquivel, alias “Mbururu”, en el banquillo de los acusados, el colegiado de sentencia dio a conocer ayer su fallo. Para una mayoría, fue una condena “simbólica” atendiendo los hechos atribuidos al sujeto de juicio. Son dos años de cárcel con suspensión de la ejecución de la prisión preventiva.

Así lo dispuso el tribunal integrado por la juez Vitalia Duarte (presidente), Serafín González y Fabio Aguilar, miembros. El fiscal Alcides Giménez pidió cuatro años de cárcel para el senador no juramentado, mientras la querella adhesiva, a cargo del abogado Víctor Enriquez, requirió al tribunal la pena de seis años.

Consultado al respecto, la representación pública señaló que la medición de la pena se encuentra “dentro de las perspectivas jurídicas”, pero que acordará una eventual apelación con la querella, luego de tener el contenido íntegro de la sentencia definitiva.

VUELTA A PRISIÓN

Conocido el fallo de primera instancia, los integrantes del colegiado ordenaron la vuelta de “Mbururu” a la penitenciaría regional, dado que se encuentra con prisión preventiva en otros dos procesos tipificados como crimen. Su abogado, Eduardo Lezcano, señaló que apelará la condena y buscará su nulidad en segunda instancia. Todos los aditamentos para el efecto están dados, atendiendo que Esquivel fue absuelto por la tipificación de robo y la coacción agravada que acusó la Fiscalía dejó de ser, ya que fue modificada solamente por cargo de coacción.

Al respecto, la presidente del tribunal de sentencia significó que “existe una duda razonable con relación al arrebatamiento de aparatos celulares, por lo que, conforme al artículo 5 del Código Procesal Penal, Rafael Esquivel debe ser absuelto”.

El condenado, cuenta con otros dos casos ya elevados a juicio oral y público, según los antecedentes. Uno de ellos es la consecuencia del atropello criminal sufrido por la familia Torrás, en el distrito de Itakyry, causa en la que fue acusado por homicidio doloso en grado de tentativa y coacción sexual, también en el mismo grado. Asimismo, está acusado por abuso sexual en una niña de 12 años; en ambos casos, las tipicidades son de crimen, con expectativa de hasta 15 años de pena privativa de libertad.