A diario saltan denuncias de robos de automóviles y motocicletas en el Alto Paraná, en algunos casos los mismos son recuperados cuando los propios delincuentes los abandonan o tienen sistema de rastreo satelital, pero el 70% desaparece. Según estadísticas de la Policía, el año pasado se sustrajeron tres vehículos por día y este año aumentaron a cinco, lo que denota que los controles preventivos no son suficientes para frenar la acción de los robacoches. Ayer, solo en Ciudad del Este, se robaron un auto y una moto a plena luz del día y hasta anoche ninguno fue recuperado.
El informe policial de la comisaría 3ª del barrio Obrero de Ciudad del Este reportó el hurto de una motocicleta que estaba aparcado en el estacionamiento de un edificio ubicado sobre la calle Enfermeras del Chaco casi avenida Capitán del Puerto. Se trata de una motocicleta de la marca Kenton, GTR 200, año 2022, de color negro, con chapa 924 AAPT, propiedad de Alejandro Diosnel Vázquez Rodríguez, de 21 años, domiciliado en el Km 7 Monday de Presidente Franco.
El afectado manifestó que alrededor de las 06:00 llegó al citado estacionamiento para luego dirigirse a su trabajo y siendo las 12:30 aproximadamente se percató de que su biciclo ya no se encontraba donde había dejado. Rápidamente, denunció el hecho y se impartió búsqueda y localización de la referida motocicleta a través del Sistema de Emergencias 911, sin embargo, el biciclo no fue recuperado.
AUTOMÓVIL
Horas más tarde, desconocidos “levantaron” un automóvil estacionado en plena calle céntrica de Ciudad del Este, específicamente sobre la avenida Carlos Antonio López y Monseñor Francisco Cedzich del barrio Juan E. O’Leary (Catedral) de esta ciudad.
Se trata de un automóvil Toyota Premio, de color plata, año 2003, con matrícula AAMH 292, propiedad de Lino Roque López, domiciliado en el barrio Remansito de esta ciudad.
El hurto se registró a las 15:00 horas y la acción de un solitario robachoches quedó grabada en el circuito cerrado de seguridad del edificio Golden Tower. En las imágenes se puede ver cuando el delincuente se acerca al auto, lo abre sin muchos problemas y luego se da a la fuga con rumbo desconocido. Al igual que la motocicleta, el automóvil tampoco fue recuperado. Ambos casos fueron comunicados al Ministerio Público para los trámites de rigor.
