El intendente de Ciudad del Este, Miguel Prieto, fue imputado por lesión de confianza, tras una supuesta compra ficticia de kits de alimentos para familias de escasos recursos durante la pandemia del Covid-19. La Fiscalía pide el arresto domiciliario del jefe comunal. También están implicados otras 10 personas, vinculadas a la Comuna esteña.
“Hemos detectado inconsistencias en esas operaciones, también la inexistencia del stock de esas mercaderías. Para nosotros no entregaron los kits, según el contrato”, explicó el fiscal Silvio Corbeta, encargado de la investigación.
El proceso guarda relación con una licitación que se realizó en marzo del 2020 por la vía de la excepción, teniendo como argumento la situación sanitaria a causa del coronavirus.
“Se compraron mercaderías por valor de G. 3.000 millones. Es una investigación que en su momento fue producto de un allanamiento, hicimos seguimiento e incluso contamos con informes de la Contraloría, donde señalan varias irregularidades”, indicó Corbeta.
Tía Chela es la empresa que proveyó los kits que fueron entregados y esta, a su vez, compró insumos a otra firma, que sería de una persona vinculada al entorno de Prieto.