
En el marco del juicio oral y público al electo senador Rafael “Mbururú” Esquivel por los delitos de coacción grave y robo, se llevó a cabo la reconstrucción de los hechos en la granja “La Sonrisa”, propiedad de la familia Arias Montalbetti. Mientras el abogado querellante asegura que los hechos se registraron dentro de la propiedad privada, el defensor del político sostiene que los incidentes se produjeron en la calle.
El acto judicial tuvo lugar el viernes pasado en el barrio Acaray de Ciudad del Este y estuvo a cargo del tribunal de sentencia, compuesto por los jueces Vitalia Duarte, Fabio Aguilar y Serafín González.
El presunto ataque a la propiedad privada ocurrió el 12 de octubre de 2019, y estuvo supuestamente liderado por “Mbururu” Esquivel y Robert Prieto, éste último también está siendo juzgado en el debate público. En aquella ocasión, se alega que el grupo de invasores agredió físicamente a los miembros de la familia Arias Montalbetti y presuntamente robó sus teléfonos celulares.
El político de Cruzada Nacional, actualmente recluido en la cárcel de CDE, fue trasladado en un vehículo de la penitenciaría regional hasta la granja en cuestión, pero se negó a descender y no participó de la recreación. Por su parte, Prieto, quien se encuentra en libertad, sí estuvo presente en el acto judicial.
Al término de la reconstrucción de los hechos, el abogado Víctor Enriquez indicó que “se determinó el lugar exacto donde Rafael Esquivel sustrajo el celular, y fue dentro de la propiedad de la granja”.
Sin embargo, el abogado Eduardo Lezcano, defensor de Esquivel, negó enfáticamente que los supuestos hechos hayan ocurrido dentro de la granja. Según Lezcano, “en los videos se puede ver claramente a las personas en la calle, fuera de la propiedad, pero hoy nos hicieron entrar a la casa de la familia Arias Montalbetti. No obstante, demostraremos que eso es falso”.
Lezcano también mencionó que “el fiscal de la causa, Alcides Giménez, sostiene que Rafael Esquivel no es autor del robo ni de la coacción, según las pruebas presentadas, y lo que intentaron demostrar hoy es que los hechos ocurrieron dentro de la propiedad, lo cual es falso”.
En el juicio oral, se concluyeron las declaraciones testimoniales y se inició la presentación de pruebas documentales, como certificados de diagnósticos médicos, actas de procedimientos, título de propiedad del inmueble atacado, mensura judicial y otros registros en papel, según informaron las partes.
Mbururu Esquivel había recusado al pleno del tribunal, lo que suspendió momentáneamente el debate. Sin embargo, con el rechazo de la recusación por parte de la Cámara de Apelaciones y la confirmación de los miembros del órgano juzgador, el juicio continúa avanzando.