Una estrategia de ampliar el patrullaje, colocar personal en la caseta de seguridad del km 20 y el control de las carreras clandestinas que se realizan los fines de semana en la ruta internacional, fueron algunos de los pedidos de los concejales de Minga Guazú, al titular de la comisaría 8ª, comisario Osvaldo René Osorio. El uniformado asumió hace pocos días la sede policial y las autoridades encontraron muy buena predisposición en él para atender los reclamos de la población.
Víctor Lugo, presidente de la Junta Municipal, señaló que la caseta del km 20 está, prácticamente, abandonada y que ahora se tendrá más presencia policial por el sector. Lamentó que el anterior jefe, comisario Gerardo Vega, no haya acompañado el pedido ciudadano, pese a los reiterados señalamientos que le hicieron los ediles y él solo acudió a una reunión con ellos, luego que advirtieran que irían a la Dirección de Policía en busca de alguna respuesta.
“Vamos a empezar a trabajar, el comisario Osorio. Llegó y ya está poniendo en orden la casa, vamos a ver qué necesita y le vamos a ayudar. Avisamos a la comunidad que se estarán haciendo controles en todos lados y que vamos a estar también viendo eso de las carreras clandestinas en el km 20, que se cobran vidas y causaron graves accidentes; todo lo que no esté en regla, se pondrá a cargo de la Fiscalía”, expresó la concejal Laura Barreto.
Las autoridades mingueras buscaron un consenso con los anteriores representantes de la seguridad en el municipio ante las sucesivas quejas de los ciudadanos que son víctimas de asaltos, despojos y también la sensación de inseguridad que se tiene en los barrios, pero no encontraron apertura en el jefe anterior que trabajaba a espaldas de la comunidad, según indicaron los concejales.
La concejal Barreto recordó que los asaltos domiciliarios son cuestiones que merecen una especial atención, además los despojos de mochilas, celulares y otras pertenencias a estudiantes de colegios y universidades, junto a otros hechos que afectan a la seguridad de los mingueros.
RECLAMOS CONSTANTES
Los miembros de la Junta Municipal indicaron que hace tiempo reciben los reclamos y reiteraron que la fiesta de María Auxiliadora, de mayo pasado, no pasó la prueba de la tarea preventiva, pues ingresaron hasta a la casa parroquial para realizar hurtos de dinero y también se rompieron los vidrios de los vehículos para llevar objetos de valor.
En la última semana de junio, el comisario Vega, acorralado por los reclamos de las autoridades locoles, fue hasta la Junta Municipal y resolvieron trabajar sobre un plan de seguridad para devolver la tranquilidad a los pobladores, pero todo quedó en una expresión de deseo.
El uniformado se comprometió en presentar un plan de acción y los ediles, por su parte, iban a recurrir al sector comercial e industrial para contar con la logística suficiente. Ahora, esperan que eso sea una realidad, de acuerdo al compromiso del nuevo titular de la comisaria.
