El Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) celebró ayer 136 años de fundación en medio de una crisis interna que se arrastra desde hace bastante tiempo. Iván Airaldi, empresario y político, referente local de los azules, señaló que lo primero que hay que hacer en este momento es sacar a Efraín Alegre de la conducción y limpiar las finanzas del partido, dejar en claro las deudas y los embargos.
También necesita construir una línea política en el actual contexto, donde el Partido Colorado tiene una supremacía y mayoría propia en la Cámara de Diputados y Senadores. “No prestarse a los juegos y peleas internas que tienen los colorados, y pretender construir mayorías coyunturales con ellos. Yo creo que el partido liberal y las demás fuerzas nuevas de oposición, deben construir un rol importante para nuestra democracia”.
Indicó que se debe fortalecer el rol de control. Aclaró que no se trata de hacer oposición por oposición o de poner palo a las ruedas a los proyectos que son importantes para el país. “Si no en el control de las finanzas públicas, controlar el gasto público, combate frontal contra la corrupción. Creo que allí es donde debe estar hoy la oposición. Hacer una oposición responsable, sin fanatismo, que actué con mucha objetividad y responsabilidad”.
Habló igualmente de involucrar a los jóvenes dentro de un proceso que es natural en todos los partidos. “Porque las organizaciones necesitan renovar sus liderazgos. Efraín ya llegó su fecha de vencimiento. El resultado de las elecciones canta eso. En el 2018, en Alto Paraná, ganó por un poco más de 7.000 votos y ahora perdió. A nivel país, en ningún departamento se ganó, esa es la realidad. Falta que él y su entorno entiendan que su ciclo ha terminado y abrir el partido a los nuevos líderes emergentes”.
FIGURAS NUEVAS
Aseguró que el PLRA tiene figuras nuevas, buenas y representativas. Mencionó a Salyn Buzarquis, que asegura tiene oficio, ya realizó varias campañas nacionales. “Así también se tiene a Líder Amarilla, senador electo, una figura nueva, fresca; también Eduardo Nakayama, que es una figura muy aceptada, tiene muy buena proyección”.
Nakayama –señaló– es una figura potable, pero que necesita llegar a las bases. “Creo que es un producto muy vendible políticamente hablando pero faltaría que estructure mejor su equipo. Nadie duda de la capacidad intelectual, de su juventud, de su energía política, pero falta llegar a las bases. Ese es un tema importantísimo en los partidos tradicionales”.
