Unas tareas “parches” que se hicieron en la escuela San Ignacio de la ciudad de Hernandarias hicieron posible que niños y docentes no estén en medio del polvo de la una pista de formación mal hecha. Pero todavía hay acciones pendientes, establecidas en una microplanificación que estaba en el orden siete de prioridades, pero luego de las denuncias pasó al 45.
La directora de la institución educativa, Prof. Daysi Pintos, encontró por casualidad al intendente Nelson Cano y lo llevó hasta la escuela para ver cómo la empresa Presenger, de Cecilio Benítez Narváez, dejó una obra inconclusa y en pésimas condiciones. Llamativamente, el jefe comunal dijo que no conocía la institución educativa que está instalada hace 21 años en el barrio San Ignacio.
La docente señaló que quedó demostrado que cuando hay voluntad política se hacen las cosas, porque luego del reclamo al jefe comunal, los encargados de obras de la Comuna estuvieron en la escuela donde cargaron los postes del tinglado, lavaron y pintaron la pista de formación.
Por esta obra se desembolsaron G. 130 millones de recursos del FONACIDE y no fue concluida, las clases empezaron en medio de una obra desastrosa y de muy mala calidad que estaba a la vista. “Dos años y medio sufrimos con esto, ahora por lo menos no hay polvo, vamos a ver cómo sigue después de las lluvias y el paso del tiempo”, apuntó la directora.
REPARACIÓN DEL TECHO
La comunidad educativa de San Ignacio pidió al intendente la reparación del techo de la institución educativa que fue erigida hace 19 años y no tuvo ningún mantenimiento. Las tejas empiezan a desprenderse y la humedad ya está pelando la estructura. Según dijo la directora, el jefe comunal les dijo que si hay pedidos del tipo en la microplanificación, la obra debe realizarse.
Sin embargo, llamativamente, las obras en la escuela San Ignacio estaban en el orden 7 de prioridades, de acuerdo a la ejecución de obras del Fonacide, pero ahora pasaron en el orden 45, sin ninguna explicación. El equipo de La Clave Comunicaciones, consultó a la directora si que habría por detrás y ella reveló que podría ser una represalia por las denuncias de irregularidades en la construcción que estuvo denunciando.
LA INSTITUCIÓN EDUCATIVA
La escuela básica San Ignacio tiene 218 alumnos y es una institución pública que alberga a los chicos del barrio del mismo nombre y de otros núcleos poblacionales vecinos. La pista de cemento que hizo la constructora Presenger en el año 2021, era inservible, pues el polvillo o humo que levanta con un leve viento no permitía siquiera realizar la formación de los alumnos y menos la práctica de deportes o las clases de educación física.
Esperan que con los “parches” introducidos se subsane el inconveniente y así, los chicos puedan, utilizar el sector como cancha y patio de formación.
