
La unidad especializada nº 1 en hechos punibles contra la propiedad intelectual, el contrabando, lavado de dinero y financiamiento del terrorismo de Alto Paraná, a cargo del fiscal Ysrael Villalba Ramírez, realizó ayer un nuevo operativo “apriete” donde se intervino un depósito ubicado en el cuarto piso del edificio Hijazi Center, situado en la avenida Adrián Jara y Piribebuy, del microcentro de Ciudad del Este.
El allanamiento se ejecutó en cumplimiento de una orden judicial emanada del juzgado penal de garantías nº 2, a cargo del magistrado Amílcar Antonio Marecos, y durante el operativo se incautaron 43 cajas conteniendo carcasas de celulares, cargadores, fundas, cables y audífonos de reconocidas marcas, valuados en millonario monto, según se informó. En el momento del operativo no se encontraba nadie en el lugar, por lo que los intervinientes tuvieron que recurrir a un cerrajero para ingresar al local. Los productos incautados fueron trasladados a la bóveda del Ministerio Público, ubicada en el barrio Fátima de Ciudad del Este.
Lo llamativo del caso es que, supuestamente, el Ministerio Público ni siquiera tenía identificado al propietario del local, prueba de ello es que tuvieron que solicitar a la administración, la identificación del propietario del depósito intervenido. Con esto queda demostrado que este tipo de procedimientos son más para dar un toque de atención a los demás comerciantes para que se pongan al día o de lo contrario pueden correr la misma suerte.