
El equipo económico nacional puso fin a los incentivos fiscales otorgados al comercio de frontera. Una de las más beneficiadas fue Ciudad del Este y las medidas fueron aplicadas en un intento por reactivar el comercio y reparar, de alguna manera, el daño provocado por el cierre del Puente de la Amistad, por más de siete meses durante la pandemia del Covid-19. Esta medida sanitaria generó cierres de comercios y miles de despidos. Muchas tiendas, hasta hoy, siguen cerradas, así como en muchas galerías se sigue observando salones vacíos.
El Gobierno nacional puso fin a las rebajas en el Impuesto al Valor Agregado (IVA) aplicadas al régimen del turismo y en el Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) a productos electrónicos y celulares. Esta determinación se adopta luego de tres años de haberse iniciado la pandemia del Covid-19. Con esta decisión se terminan los regímenes especiales y diferenciados dentro del sistema tributario nacional.
De acuerdo a los datos, las últimas rebajas que estaban vigentes vencieron el 30 de abril. El IVA que es aplicado a la importación de bienes bajo el régimen del turismo y al ISC, aplicado a la importación o primera enajenación de electrónica y aparatos celulares. Ambos gravan el consumo y son indirectos, es decir, se trasladan al comprador final.
El IVA vuelve a la tasa final de 1,5%. Hasta el fin de abril estaba en 0,5%, lo que implicaba una reducción del 67%. En lo que respecta al ISC, vuelve a tributar el 1% sobre el valor de los bienes. Hasta el mes pasado, la tasa era del 0,5%, equivalente a una disminución del 50%.
Desde Tributación se informó que estas medidas especiales fueron aplicadas buscando oxigenar al golpeado comercio de Ciudad del Este, Salto del Guairá y Pedro Juan Caballeros, entre otros municipios que viven del comercio de frontera. La misma fuente asegura que en los últimos meses la recaudación en estos impuestos observó un aumento del 24%.
Para la Secretaría de Estado de Tributación (SET), la actividad económica volvió a los niveles registrados antes de la pandemia, por lo que se justifican –sostienen– que el sistema tributario debe retornar a la normalidad.
La misma fuente menciona que se observa una mejora de la actividad económica en estos primeros meses del año que tuvo un impacto positivo en las recaudaciones de las principales ciudades fronterizas. En la oficina impositiva de Ciudad del Este se tuvo un crecimiento del 20,7% al cierre del primer trimestre, lo que se traduce en G. 235.405 millones.
GOLPEADOS
El comercio de Ciudad del Este fue el más golpeado por la pandemia debido al prolongado cierre de frontera. Como se sabe, esta región del país vive del comercio con los brasileños mayoritariamente y en menor grado con argentinos y de otros países.
Esta situación, según gremios organizados del comercio local, tuvo un impacto duro, lo que se tradujo en el cierre de cientos de comercios, muchas galerías hasta hoy mantienen muchos salones vacíos. La recuperación de la mano de obra perdida aún no logró alcanzar los niveles de pre pandemia.
Desde el año pasado, la economía local empezó a recuperarse, beneficiada con feriados prolongados que este año se volverán a replicar. Eventos, como el Black Friday, ayudaron a mover la economía, pero a pesar de lo que dice el Gobierno nacional, los comerciantes locales aseguran que aún están lejos de alcanzar los niveles de movimiento registrado en el 2019.
Si bien hay un aumento en las importaciones de artículos para el comercio local, eso se da porque las estimaciones de ventas para este año son mejores que las del año pasado. Además, Brasil muestra estabilidad, permitiendo tener un dólar relativamente estable frente al real, situación que ayuda a mantener la capacidad de compras de los brasileños en el exterior. Sostienen que mirar solamente los números de recaudación por pago de tributos, no necesariamente implica un aumento en las ventas, sino lo que ha mejorado es la expectativa que se tiene a futuro.