Fue aprobado en la sesión de la Junta Municipal de Hernandarias el pedido de intervención a las areneras que están en el río Acaray, dentro del municipio que están depredando el cauce y, de acuerdo a los expertos, su recuperación sería prácticamente imposible.
El pedido fue presentado por el concejal David Monzón, quien indicó que en toda la extensión del río entre Hernandarias, Ciudad del Este y Minga Guazú, el peso de las barcazas, las tareas de extracción de arena y otros procedimientos destruyen por completo el cauce. El caso más evidente está en la colonia Félix de Azara, según indicó.
“Esta problemática afecta a los municipios del área de influencia, hay denuncias de varios pobladores de la zona y en lo que respecta a Hernandarias, hemos pedido que la dirección de medio ambiente y el juzgado de faltas, verifique si están habilitadas, si tiene la autorización del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADES) y si corresponde, que se remitan los antecedentes a la Fiscalía”, explicó el concejal.
En caso de que no tengan la licencia del MADES, los responsables por las extracciones de gran cantidad de arena se exponen a ser procesados por alteración de los cauces hídricos, estipulada en la ley del medio ambiente.
MUCHOS RECLAMOS
Según el edil, muchos dueños de propiedades en las inmediaciones del río presentaron sus reclamos en la Junta Municipal y que en más de una ocasión se toparon con accidentes de derrames de aceites o combustibles en el cauce, en cantidades enormes que destruyen todo el ecosistema.
Por antecedentes de años anteriores y el relato de vecinos, es común observar en cualquier parte la presencia de grandes barcazas que se dedican a la extracción de arena. Solamente en el sector entre los kilómetros 9 y 10, en la zona de Ciudad del Este, dos enormes embarcaciones trabajan a diario succionando toneladas de arena del río y también hacen lo mismo en Hernandarias.