Solo en Minga Porã y en San Cristóbal, los pobladores “pueden enfermarse” después de las 15:00, porque las Unidades de Salud de la Familia (USF) brindan atención las 24 horas, los siete días de la semana. Estas dependencias sanitarias son la puerta de entrada a los hospitales, pero muchos pacientes no encuentran la respuesta deseada.
La limitación de horarios en los servicios ha generado críticas de la población, principalmente en el interior donde de por sí hay precariedades y con la falta de médicos hay casos conocidos como mujeres que dieron a luz en un taxi, niños que tuvieron crisis respiratorias y fueron llevados a otros servicios en vehículos particulares, y hasta desenlaces fatales, debido a la falta de médicos en los distritos del interior.
El doctor Jorge Rojas, titular de Atención Primaria de la Salud (APS) en el Alto Paraná, explicó que los servicios que brindan atención integral a los pobladores tampoco pueden con casos de mayor complejidad y que esos deben ser derivados a hospitales de cabecera como Ciudad del Este, Hernandarias o Minga Guazú.
En total, son 108 USF en todos los distritos del departamento, muchos cuentan con más de una o dos unidades en sus territorios sociales, por la densidad poblacional que existen. Esto significa que solamente el 35% de los habitantes del Alto Paraná, tienen acceso a este primer nivel de atención de salud pública.
El doctor Rojas reconoció que el 65% de la población todavía debe recurrir a otros servicios para tener atención médica cuando que las USF realizan consultas ambulatorias y domiciliarias, principalmente, asistencia a pacientes encamados o que por alguna discapacidad física no pueden llegar hasta el establecimiento de salud.
POCA INVERSIÓN EN SALUD PÚBLICA
En un acto de sinceramiento, el doctor Rojas admitió que hay poca inversión en salud pública, de acuerdo al Presupuesto general de Gastos de la Nación, pero valoró el crecimiento de las unidades de salud de la familia, en poco más de una década. De las 28 que se tenían hace 12 años, ahora hay 108, pero todavía existe mucho por hacer.
El trabajo de los médicos y licenciados de la USF es brindar una atención básica de salud, promocionar los servicios que la cartera de Estado ofrece a la población, tanto en las sedes de las USF como recorriendo la comunidad como en las escuelas, colegios, clubes y otros sitios.
Las vacunas, medicamentos básicos como antipiréticos, antigripales, contra la hipertensión, tratamiento nutricional, desarrollo de programas del Ministerio de Salud y otros servicios, son encontrados en las USF, de lunes a viernes de 07:00 a 15:00, en la mayoría de los locales del departamento.
“Por el flujo de personas, las zonas urbanas como Ciudad del Este y otros distritos, brindan atención a 800 a 1.000 pacientes mensualmente, pero en las zonas rurales, eso alcanza a 400 a 600 personas que concurren a los servicios o los profesionales van hasta sus casas”, explicó el doctor Rojas.