En su sesión ordinaria de la presente semana, el pleno del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM) demostró, una vez más, su apoyo incondicional a la denunciada juez penal de garantías de Ciudad del Este, Cinthia Garcete, acusada por mal desempeño de sus funciones. Pese a los esfuerzos de la acusadora, el pasado martes, su nombre no fue citado en la sesión.
Sin asco, la referida magistrada mandó a su casa bajo la figura del arresto domiciliario a un criminal que a sangre fría asesinó de dos balazos a su pareja adolescente de 17 años. El procesado está identificado como Anderson González Ocampos, hoy de 20 años, imputado por la fiscal Zunilda Ocampos con cargo por feminicidio y pedido de prisión preventiva. En su momento, la juez Cinthia Garcete ordenó el encarcelamiento del encausado, pero ocho meses después, a pedido del defensor técnico, revisó la medida cautelar y resolvió mandarlo a su domicilio, pese a su criminal acción y la expectativa de pena.
La madre de la víctima arriesgó hasta su trabajo para lograr que su acusación sea admitida y se solicite las compulsas de la causa a la magistrada, quien tiene hasta intenciones de ascenso.
Una vez más, el JEM demostró su pasividad ante los atropellos a la Ley, que comete arbitrariamente la cuestionada magistrada ante la mirada “benefactora” de los integrantes del órgano que debe sancionarla y nunca ni siquiera fue apercibida. Garcete es una privilegiada también en la Corte Suprema de Justicia, ya que su gestión fue siempre aprobada, más por razones políticas que por su manera de administrar justicia.
LINDOMAR
El mismo día de la sesión en el JEM, el juez de crimen organizado Gustavo Amarilla reiteraba su orden de captura nacional e internacional contra Lindomar Reges Furtado, para su extradición al Brasil, en el marco de un proceso por tráfico internacional de estupefacientes. La figura de la juez Cinthia Garcete apareció en este caso, luego de que el buscado internacionalmente se haya fugado ante un procedimiento para su detención en el Paraná Country de Hernandarias, a bordo de una camioneta de la tabacalera del expresidente Horacio Cartes, por el portón principal del complejo residencial.
Garcete le dio curso a un pedido de habeas corpus preventivo presentado por Lindomar y prohibió a la Policía cualquier tipo de verificación o control en su contra. Los antecedentes de denuncias contra la magistrada son extensos, pero curiosamente, el JEM no encuentra méritos para al menos suspenderla en sus funciones, gracias a sus tentáculos políticos.