Un lekaja argelado que, supuestamente, maltrató física y verbalmente durante 38 años voi a su doña, fue procesado por karai fiscal Demetrio Bareiro, quien sin mayores preámbulos pidió su detención. El proceso es por violencia familiar, que tiene expectativa de pena carcelaria de hasta seis años.
El presunto garrotero héra Fermín Orué Cubas, un jubilado de 63 años. El mismo, ndaje, cometió el nuevo hecho de violencia familiar en el momento en que se fue a exigir a su lapa un acuerdo para el levantamiento de la restricción de exclusión de hogar que le había enzoquetado el Juzgado de Paz justamente por un caso de ñembyepoti anterior.
Según los datos, el sindicado mbaretepe quiso convencer a la mujer para que el asunto termine en el oparei. Al no conseguir su propósito, agredió otra vez a la víctima. Inicialmente, la kuñakarai había presentado la denuncia en contra del sexagenario el 10 de mayo de 2021, tras una agresión sufrida en la vivienda familiar, ubicada en la calle Cerro Corá, barrio San Juan de Presidente Franco. Por este caso se dictó la prohibición de acercamiento.
Pero oiko el nuevo episodio de violencia y la víctima formuló una nueva acción. La misma omombe’u que ikueraima de su ména argelado, quien desde que se casaron –hace 38 años– la maltrata física y sicológicamente, además de amenazarla de muerte en reiteradas ocasiones, ndaje.
Tras analizar cada uno de los elementos de sospecha, el fiscal Bareiro, de la unidad zonal de Presidente Franco, decidió imputar a karai Fermín Orué y pidió su prisión, una vez que sea capurado, considerando el peligro de fuga y de obstrucción a la investigación. El sesentón se expone hina hasta 6 años de pena privativa de libertad, en la “cacerolita”, conforme he’i la ley.