Un atolondrado rapai que amenazó con asesinar a su mamá y a una hermana, pero terminó degollando a un gato, mascota de la familia, ligó cuatro años de pena privativa de libertad aipo por violencia familiar mba’embo. El juicio oral y público oiko kuehe en el Poder Judicial de Ciudad del Este.
El condenado está identificado como Roberto Leal Faría Martins, de 34 años, albañil, oriundo de Minais Gerais (Brasil), quien fue hallado culpable por el hecho punible contra el estado civil, el matrimonio y la familia (violencia familiar).
El Tribunal que lo sentenció estuvo presidido por la magistrada Vitalia Duarte y conformado por los jueces Fabio Aguilar y Serafín González. Mientras, la fiscal Rocío Celeste González representó al Ministerio Público y produjo varias pruebas irrefutables contra el acusado.
Durante el debate quedó plenamente demostrado que el acusado ejercía violencia física y a la vez sicológica sobre su madre y hermana, a quienes también amenazaba de muerte en reiteradas ocasiones, ndaje.
Según antecedentes kuéra, la última agresión oiko el 24 de marzo de 2019, a las 11:30 horas aproximadamente, en una casa de la capital del Alto Paraná. En aquella oportunidad, la madre recriminó a Roberto Leal por haber llevado a un tipo a dormir en la casa.
Pero el reclamo descontroló totalmente al sujeto, quien muy ofuscado comenzó a romper la ventana de vidrio y destrozó todo lo que encontraba a sus pasos. Upei katu intentó agredir físicamente a su mamá, quien pudo zafarse como pudo.
Luego, el sujeto tomó un cuchillo y atacó nuevamente a la mujer, quien se encerró en una habitación con su hija para evitar ser agredidas. Sin embargo, el extranjero agarró al gato de la casa, lo golpeó salvajemente y lo tiró. Posteriormente, volvió a agarrar al animal y lo degolló con el cuchillo, con la intención de amedrentar a sus familiares y amenazarlas de muerte voi por encerrarse en la pieza.
VÍCTIMAS ESCAPARON POR LA VENTANA
A continuación el arriero alhaja comenzó a patear la puerta con el propósito derribarla y atacar a las dos mujeres con un feroz kyse, pero las víctimas que estaban muy asustadas salieron por la ventana del fondo y se escondieron en una casa ajena, desde donde llamaron al Sistema 911 de la Policía Nacional.
Los voláis llegaron rápidamente y detuvieron al agresor, quien estando en presencia de los polis amenazó nuevamente a liquidar en cualquier momento a su madre y hermana.
Posteriormente, la Unidad Especializada en la Lucha contra la Violencia Familiar intervino en el caso y abrió el proceso contra el brasileño carruaje. Finalmente, la fiscal Rocío González propició la condena del acusado a 4 años de pena carcelaria. Tal vez tras las rejas aprenda a ser buen hijo. Roberto Leal Faría Martins debe aprender que una mujer jamás se le debe golpear, y mucho menos voi cuando se trata de la propia madre.