
MINGA GUAZÚ. Un trabajador residente en el km 26 Acaray casi muere desangrado al no ser asistido en el hospital distrital de esta ciudad, por la desidia que se instaló en el centro asistencial, dirigido por la Dra. Olga Castillo. El hombre sufrió un accidente con una máquina cortadora de madera que cayó sobre su brazo y le produjo una profunda herida. Tuvo que manejar su vehículo hasta el nosocomio ubicado en el km 16 y no encontró un solo médico de guardia que lo atendiera. También pidió agua para tomar y no le dieron, porque en el no se cuenta con el vital líquido. Los pacientes con cuadros graves son rechazados, ni siquiera reciben los primeros auxilios, hecho que ya se denunció en reiteradas ocasiones.
La historia traumatizante fue vivida y contada por el paciente Óscar Diosnel Troche, quien el lunes a la tarde se encontraba trabajando en el km 26, lado Acaray, de Minga Guazú, cuando accidentalmente cayó una máquina cortadora de madera por su brazo, lado izquierdo, que le produjo un corte profundo. Como estaba en compañía de otra persona que no sabía conducir, tomó su vehículo y manejó unos 10 kilómetros, herido y desangrándose en busca de asistencia.
Troche llegó al hospital distrital de Minga Guazú con la esperanza de que lo asistan, pero no halló un solo médico de guardia, había aparentemente residentes que no lo atendieron, solo llamaron a los bomberos para que se lo traslade al pabellón de emergencias médicas de Ciudad del Este. El paciente lamentó que, por lo menos, no le hayan hecho los primeros auxilios, o vendado la herida de modo a sostener el sangrado.
Dijo que mientras esperaba que lleguen los bomberos con el insoportable dolor y la deshidratación pidió agua para tomar, lo cual tampoco tenían en el hospital. Se trata de una situación que, para Salud Pública, es “un caso más”. Mientras tanto, el pobre hombre casi se desangra, y casi pierde el brazo por tanta desidia.
NADA CAMBIÓ
En diciembre del 2021, un hombre murió por falta de asistencia en ese mismo hospital y generó todo un escándalo en el área. En aquella ocasión, los médicos de guardia se negaron a atenderlo alegando supuesta falta de insumos. La muerte de este hombre pudo haberse evitado si era atendido.
Luego de este hecho se realizó una reunión entre el Cuerpo de Bomberos Voluntarios, el director de la Décima Región Sanitaria, Arturo Portillo, la directora del Hospital de Minga Guazú, Olga Castillo, y autoridades municipales para tratar sobre el deficiente servicio en urgencias del centro asistencial. Prometieron trabajar y dar respuestas a los ciudadanos, pero no cambió absolutamente nada. Los doctores de vacaciones, y los pacientes a su suerte.