El grupo de campesinos de la colonia Toryveté que estuvo por un año acampado frente a la oficina regional de Instituto del Desarrollo Rural y de la Tierra (INDERT), en Ciudad del Este, levantó su medida de fuerza, pero la traslada a la capital del país, frente a la sede del ente público, hasta lograr una solución al conflicto que tiene denuncias en el fuero civil y penal del Poder Judicial.
Marcial Acosta, el dirigente de los labriegos, dijo que presentaron una denuncia penal por invasión de inmueble contra los extranjeros propietarios de la empresa Desarrollos Madereros y añadió que debe realizarse la mensura judicial para determinar la ubicación y los dueños de las tierras en conflicto. No consideran válida la mensura privada que encomendaron los dueños de la compañía.
Son al menos 2.000 hectáreas y unas 200 familias las que reclaman la ocupación de esas tierras, que consideran están destinadas para los beneficiarios de la Reforma Agraria, pero fueron vendidas a extranjeros.