Anoche a las 23:30, el fiscal Luis Trinidad se apersonó al sitio de reclusión del suboficial segundo Ariel Sanabria Ortiz, convocó a su representante legal Julio Ramírez, utilizando la tapa del Diario La Clave para un careo en el que convencieron al agente policial imputado por homicidio doloso, a que entregue el arma con la que presuntamente disparó en la persecución y mató a Osvaldo Barrios, alias “Chango”.
Una hora más tarde, el abogado defensor se constituyó a la sede fiscal y entregó la pistola lustre negro, de la marca Bersa, modelo Thunder9, serie 810592, calibre 9 mm con un cargador sin proyectiles.
El fiscal del caso, confirmó esta mañana, que el arma será remitida al laboratorio forense en la capital del país para que los técnicos realicen su pericia y la comparación con las ranuras del tubo cañón marcadas en el plomo que se levantó del lugar del suceso fatal.
La Clave, accedió a cámaras de circuito cerrado de seguridad donde se destaca el arma que utilizaba el procesado sub oficial contrastando con la que presentó inicialmente en la fiscalía. Este elemento será fundamental para la definición de la tipificación aplicada en la imputación con pedido de prisión que deberá resolver la juez de garantías Nilda Estela Cáceres, luego de su audiencia de imposición de medidas.
SUJETO PERSEGUIDO ESTABA DROGADO
El fiscal del caso ordenó igualmente ayer, el examen laboratorial de la orina de Noor Mohammad Salam Cardozo, en cuya persecución, se produjo el disparo mortal contra un joven padre de familia. La detección cualitativa de metabolitos de drogas de abuso, fue encargada por la médica forense Raquel Cáceres a la bioquímica Nilda Victoria Esquivel Ruiz.
Según la profesional, utilizó el método de Inmunocromatografía de un solo paso, al análisis de referencia. Según el resultado final, la orina contenía 1.000ng/ml la sustancia denominada “Anfetamina” en los residuos analizados. Con este informe, se complica la situación procesal de Salam Cardozo, quien tenía prohibido judicialmente el consumo de estupefacientes.
