El juzgado de ejecución penal del primer turno declaró la rebeldía de la escribana Ana Rosalba Agüero y dispuso la captura de la misma, en el marco de la causa en la que había sido condenada por producción de documentos de contenido falso y producción de documentos no auténticos. Agüero, quien sigue trabajando tranquilamente “como si nada” en su oficina de Ciudad del Este, es cómplice del supuesto comerciante Isidro Torres Cabañas, catalogado como “Rey de las estafas”.
Recordemos que Torres Cabañas y la escribana Ana Rosalba Agüero habían sido imputados por estafa y otros por el fiscal Carlos Almada, en setiembre del año 2016. Era por la venta de un inmueble de 5 hectáreas por valor de 120.000 dólares americanos con documentos falsos a la abogada Hilda Arrúa, quien resultó víctima. La imputación se dio por estafa, producción de documentos de contenido falso y producción de documentos no auténticos.
Según la investigación fiscal, Torres Cabañas y la escribana falsificaron un poder especial para la supuesta venta del terreno cinco años después que el propietario haya fallecido. El poder especial fue otorgado a Torres Cabañas y redactado en la escribanía Agüero, de la escribana Ana Rosalba Agüero, ubicada en la calle Pampliega y Adrián Jara, microcentro de CDE.
En el marco de esta causa, el “Rey de las estafas” fue condenado a nueve años de prisión y la escribana a seis años, sin embargo, posteriormente se volvió a hacer un nuevo juicio a Cabañas, en el cual resultó condenado a 5 años, en junio del 2020.
En tanto, la sentencia a la escribana inclusive fue confirmada en la Cámara de Apelaciones, sin embargo, la misma siempre maniobró para continuar gozando de medidas sustitutivas a la prisión. Con esto, inclusive, logró continuar trabajando normalmente, y presumiblemente sigue embaucando a personas incautas en su escribanía, ya que tiene otro proceso por la misma situación, en el cual está pendiente aún el juicio oral.
No obstante, ahora el juzgado penal del primer turno, a cargo del magistrado Troadio Galeano, declaró la rebeldía de la mujer y ordenó a la Policía Nacional su captura, para su posterior remisión al correccional de mujeres Juana María de Lara. Según mencionaron víctimas del “Rey de las estafas” y de Ana Rosalba Agüero, esta es la única manera de evitar que la misma siga embaucando a personas incautas, ya que la mujer continúa haciendo oficina normalmente en su escribanía, como si nada. Es de esperar que los uniformados “encuentren” a la escribana, ahora prófuga de la justicia, ya que la misma ni siquiera se toma el trabajo de ocultarse, al acudir diariamente a su escribanía para trabajar.
