Una comitiva fiscal-policial, encabezada por el cuestionado fiscal Sergio Irán Villalba, llevó a cabo el allanamiento de una vivienda ubicada sobre una calle sin denominación y avenida Capitán Bado y Cadete Pando del km 4 de Ciudad del Este. Llamativamente, los intervinientes no sabían qué o quiénes buscaban. Para documentar el aparatoso operativo, el fiscal caratuló la causa como “a determinar” que arrojó la detención de 11 brasileños (nueve mujeres y dos hombres), todos docentes de una universidad privada.
El sugestivo procedimiento se llevó a cabo el martes último, alrededor de las 05:00. El fiscal Sergio Irán Villalba, con orden del juez de garantías Amílcar Marecos, y agentes de Investigación de Delitos, Crimen Organizado y del Grupo Especial de Operaciones (GEO), ejecutó el procedimiento. Llamativamente, la causa que inventaron para allanar la vivienda está caratulada como “a determinar”, es decir, que ni ellos sabían lo que buscaban.
Los intervinientes catearon la residencia y ubicaron allí a 11 brasileños (nueve mujeres y dos hombres), que se identificaron como docentes de la universidad privada UNIDA.
Los extranjeros fueron identificados como Jonny Andrade Barroso, Aldenor Xavier Gonçalves, Elton Ferreira De Freitas, Leandro Bastos De Lima, Matheus Nunes Medeiros, Frangernan Braga Madureira, Gilson Guimaraes Peti, Alcemir Gomes De Oliveira, Messias Mendonça Gonçalves, Ocelia De Sousa E Sousa y Ana Paula Gonçalves De Sousa.
Según el reporte oficial, los hombres fueron trasladados en carácter de demorados a la Fiscalía y las mujeres permanecieron en la casa.
Los investigadores, a través del Comando Tripartito, confirmaron que ninguno de los citados cuenta con antecedentes y orden de captura en su país de origen y todos demostraron que cuentan con las documentaciones de Migraciones para la residencia en el Paraguay.
¿QUÉ BUSCABAN?
Al decir por la caratula de la causa abierta en el Ministerio Público (a determinar), el fiscal Sergio Irán Villalba ni siquiera sabía qué o a quiénes buscaba. Movilizaron toda una estructura policial para allanar una vivienda donde residen los docentes brasileños que no tienen antecedente policial siquiera en su país. Lastimosamente, el juez Amílcar Marecos también se prestó para este circo montado por el presentante de la sociedad, que no encontró nada irregular tras el aparatoso operativo.
